Ismael Álvarez, condeado por acoso sexual, renuncia a que un centro cívico lleve su nombre

El ex alcalde de Ponferrada, Ismael Álvarez, que fue condenado por acoso sexual a la concejal Nevenka Fernández, ha enviado esta tarde una carta a la junta vecinal de Dehesas en la que renuncia a que lleve su nombre un centro cívico ubicado en esta pedanía de la localidad leonesa. En la misiva, según ha podido saber este periódico, Álvarez agradece el gesto, que le ha hecho "muy feliz", pero afirma que no quiere "causar más problemas", en referencia a la polémica suscitada en los últimos días. Posteriormente, el Ayuntamiento de Ponferrada ha informado de que la propuesta ya no se debatirá en el pleno del viernes.

En la carta, enviada por Álvarez al actual regidor, Carlos López Riesco (PP), y al presidente de la junta vecinal del Dehesas, Julio Potes, el ex alcalde pide que este asunto "quede sobre la mesa". Además de reiterar su inocencia "en los hechos" por los que se le condenó, Álvarez señala que renuncia "a la defencia" por tres razones. La primera, por que no quiere que "el pueblo de Dehesas" tenga que sufrir "un ataque tan furibundo" como el realizado por la concejal del PSOE en el Ayuntamiento de Ponferrada, Ángeles Marqués, que acusó de "indignos a sus habitantes por este reconocimiento". A renglón seguido, añade, en referencia al PSOE, que "los que se vanaglorian de tener un talante conciliador son los primeros en mostrar su intransigencia cuando les conviene políticamente".

Ésta no es la única crítica de Álvarez a los socialistas, ya que en otro párrafo, en el que recuerda que ya ha cumplido la condena y asumido sus responsabilidades políticas, les acusa de "doble moral", al alentar en su opinión "el linchamiento eterno de sus oponentes por un lado y, por otro, solicitar el indulto para sus allegados". El ex alcalde se refiere a la petición de indulto por parte de Felipe González para el ex secretario de Estado de Seguridad Rafael Vera, de la que se ha desmarcado la dirección del PSOE. En segundo lugar, Álvarez subraya que no quiere que un centro cívico por el que luchó "se convierta en motivo de polémica y no en lo que debe ser, un foco de cultura, concordia y encuentro".

Las críticas de organizaciones feministas

La tercera razón de Álvarez es que no quiere "causar más problemas a nadie". Poco después, el Ayuntamiento de Ponferrada, gobernado por el PP, ha zanjado el asunto en una escueta nota enviada a los medios, en la que informa de que el asunto ya no se debatirá en el pleno municipal del próximo viernes "en consecuencia con la petición" de Álvarez. La Comisión de Cultura del Ayuntamiento dio previamente su visto bueno a la propuesta a pesar de la condena que, por un delito de acoso sexual, pesa sobre el ex regidor. Esta decisión se produce después de que a lo largo del día se hayan sucedido las condenas y las presiones al Ayuntamiento de Ponferrada para que impidiera que el centro cívico se llamara Ismael Álvarez.

Entre ellas, la más destacada ha sido la de la dirección del PP, que ha llamado a filas al Ayuntamiento de Ponferrada. En un tono diplomático, le ha pedido "que reflexione" sobre la iniciativa. Por su parte, el secretario provincial del PP de León, Eduardo Fernández, ha asegurado entender "la indignación de mucha gente", aunque ha matizado que le consta que "él [Álvarez] es el primero en lamentar la polémica generada". También ha hecho hincapié en que la propuesta, planteada por la junta vecinal de Dehesas al Ayuntamiento ponferradino, no sólo contó con la aprobación de los representantes del PP en esta entidad local, en la que nació Álvarez, sino también de un vocal del PSOE. "Si hay algo que reprocharle al PP, al menos, en la misma medida habría que reprochárselo al PSOE", ha sostenido el secretario provincial.

El PSOE y la Red Feminista han exigido al líder del PP, Mariano Rajoy, que desautorizara el proyecto, que las asociaciones de mujeres han tachado de una "provocación inadmisible" que causa "bochorno", a lo que han añadido que comportamientos como estos producen que la víctima, Nevenka Fernández, sea una "exiliada política por razón de género". Lola Pérez, portavoz de la Red feminista, ha señalado que "Rajoy no debería consentir que ocurran estos hechos, que se premie de esta manera a un acosador", al tiempo que se ha preguntado "qué valores morales se están destacando con esta iniciativa". Maribel Montaño, secretaria de Igualdad del PSOE, también se ha pronunciado con respecto a este asunto, sobre el que ha afirmado que "no es sólo que se sea permisivo con estas actitudes machistas si no que además el PP las premia, es intolerable". Montaño ha exigido a Rajoy que se impida que "se llame al centro con el nombre de este delincuente sexual condenado".