Marruecos considera una "agresión flagrante" el desalojo de Perejil

Marruecos ha respondido con firmeza al desalojo y posterior reocupación del islote de Perejil, próximo a Ceuta, por fuerzas especiales del Ejército español. Un comunicado de la Casa Real ha calificado de "agresión flagrante" la operación militar.

El comunicado ha sido difundido esta tarde por Hassan Aourid, portavoz oficial del Rey de Marruecos, al término de un consejo de ministros extraordinario presidido por el propio monarca.

"España quiere utilizar esta cuestión y transformarla de una diferencia política a un conflicto militar", explica la nota, que añade que "España quiere imponer por la fuerza los hechos consumados".En una línea similar, el ministerio de Exteriores de Marruecos ha exigido esta mañana a España la "retirada inmediata y sin condiciones" de las fuerzas que desalojaron del islote de Perejil.

Abiertos al diálogo

Por la tarde, en otro comunicado oficial, el titular de Exteriores, Mohamed Benaissa, ha asegurado que la acción española es "según el derecho internacional, una declaración de guerra". Después, en un tono más conciliador, ha asegurado que su país está dispuesto a volver a dialogar siempre que [las fuerzas españolas] se retiren" y se comprometan a "no volver a ocupar" el islote. "Somos optimistas y confiamos en que la sabiduría y el espíritu de diálogo van a triunfar", ha manifestado.

Según Benaissa, Rabat y Madrid ya habían llegado ayer a un principio de acuerdo, auspiciado por EE UU, que incluía la retirada "condicional" de las tropas marroquíes del islote. Sin embargo, tras la "ocupación" de esta mañana, Marruecos ha dado por roto el pacto y ha exigido la "retirada inmediata y sin condiciones" de los soldados españoles

Por la mañana Marruecos había afirmado que había "sometido inmediatamente el caso a la ONU, incluido el Consejo de Seguridad, así como a la Liga Árabe, a la Organización de la Conferencia Islámica y mantiene contactos a título bilateral con varios países hermanos y amigos que siguen la evolución de la situación". Sin embargo, desde Naciones Unidas se ha precisado que todavía no les consta reclamación alguna de Rabat.