Aitor Aguirrebarrena, miembro del 'comando Totto'
Está acusado de los asesinatos de José Luis López de Lacalle y de dos guardias civiles
El presunto miembro de ETA Aitor Aguirrebarrena Beldarrain, de 35 años, está acusado de haber formado parte del comando Ttotto y de intervenir en los asesinatos del columnista José Luis López de Lacalle y de dos guardias civiles en la localidad de Sallent de Gallego.
Aguirrebarrena, alias Peio y Tarzanito -por su relación familiar con el también presunto miembro de ETA José Luis Aguirrebarrena Ruiz de la Cuesta, Tarzán- es natural de la localidad guipuzcoana de Lizarza.
El presunto miembro de ETA fue reclutado en noviembre de 1999 para incorporarse a la organización terrorista y formar el comando Totto junto con Ignacio Guridi Lasa y Asier Arzallus Goñi. Los tres acudieron a un curso de adiestramiento en el uso de explosivos impartido por miembros de ETA en enero de 2000 en Francia.
El primer atentado cometido por este comando fue el asesinato de José Luis López de Lacalle, en Andoain, el 7 de marzo de 2000. Guridi fue el presunto autor material de los disparos, mientras Arzallus vigilaba y Aguirrebarrena esperaba al volante de un automóvil para darse a la fuga.
Los tres cometieron también el atentado con bomba-lapa que el 20 de agosto de ese mismo año costó la vida en Sallent de Gallego a los guardias civiles Irene Fernández Pereda y José Angel de Jesús Encinas.
Además, el comando Totto colocó un coche bomba junto al cuartel de la Guardia Civil de Agreda (Soria) el 16 de julio de 2000 en el que resultó herida la mujer de un agente.
Guridi, Aguirrebarrena y Arzallus, presuntamente, colocaron también las bombas que, el 10 de septiembre, destruyeron la discoteca Txitxarro en la localidad de Deba, propiedad de la familia Korta. Otro atentado fallido del grupo fue la colocación de una bomba oculta en un macetero junto a la vivienda de un guardia civil en Cintruénigo, que fue desactivada.
El comando quedó desarticulado el 22 de febrero de 2001, después de que la Ertzaintza detuviera a Guridi Lasa, poco después de que el grupo hubiera colocado varias bombas que destruyeron el Centro de Internamiento de Menores de Zumárraga. Arzallus y Aguirrebarrena lograron darse a la fuga y pasar a Francia.
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