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El Observatorio de Salud y Medio Ambiente cumple 15 años

Sus informes, elaborados por la aseguradora DKV, en colaboración con entidades como Ecodes e IS Global, son una referencia científica sobre el impacto del cambio climático en el bienestar humano. Buscan una cuádruple conversión: la información rigurosa en diagnósticos precisos, los diagnósticos en soluciones eficaces, la divulgación en conciencia ciudadana y la conciencia en activismo transformador

El Observatorio, pionero en España, ha publicado 18 informes temáticos desde 2008, la mayoría con más de 150 páginas de análisis, datos y artículos científicos.
El Observatorio, pionero en España, ha publicado 18 informes temáticos desde 2008, la mayoría con más de 150 páginas de análisis, datos y artículos científicos.Philip Thurston (Getty Images)

Si un árbol cae en el bosque pero no hay nadie para escucharlo, ¿hace ruido? La alianza entre DKV, Ecodes (Fundación Ecología y Desarrollo) e IS Global tiene clara su respuesta a este viejo dilema filosófico: no, no hace ningún ruido si nadie escucha su caída. Dicho de otra forma: un problema social no existe, aunque sus consecuencias sean lacerantes, si no consta en acta ni genera titulares.

Aunque la conciencia sobre el cambio climático está en las agendas de científicos y activistas desde hace décadas —a mediados de los setenta se publica la primera obra con resonancia, The Genesis Strategy: Climate and Global Survival—, hace solo tres lustros aún no había calado en la sociedad. Para el ciudadano común, que ya sufría sus efectos aunque desconocía sus causas, la degradación ambiental no hacía ruido en el bosque. “Aunque hoy parezca increíble, 15 años atrás no había conciencia de la relación entre salud y medio ambiente. Un muro insalvable se levantaba entre empresas y oenegés, cuando todavía Naciones Unidas no había dicho alto y claro que el único camino para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible es la alianza entre ellas. Por eso, en ese preciso momento, nace el Observatorio”, explica Víctor Viñuales, director ejecutivo de Ecodes.

En estos documentos se analizan y revisan periódicamente las políticas públicas y los estudios sobre el impacto en la salud de los españoles, dentro del contexto comunitario e internacional

Parte de una premisa: los tratamientos eficientes solo pueden prescribirse sobre el diagnóstico preciso de la enfermedad. Por eso, como apunta Javier Cubría, presidente del Comité Ejecutivo de DKV, el Observatorio recaba datos rigurosos de fuentes científicas autorizadas para analizar a fondo diferentes aspectos de esa enfermedad. “Con la vocación de ser útiles, claros y ayudar al lector a comprender. Y sobre todo, más allá de llamar la atención sobre los efectos ambientales en la salud y el bienestar, y más allá de aportar información clave al debate público, queremos sensibilizar, concienciar, instar a la movilización ciudadana y de los agentes implicados para asumir responsabilidades en la búsqueda de soluciones”, amplía Cubría. “Honestamente, creo que lo hemos conseguido”.

Anticipación

El balance de los 18 informes publicados desde 2008 —si el volumen es un indicio de exhaustividad, suelen superar las 150 páginas— robustece su capacidad de anticipación. En muchos casos avanzan investigaciones relevantes sobre temas que aún no resaltan en los titulares, o no con la jerarquía que merecen sus efectos.

Por ejemplo, el impacto de la contaminación en los alimentos y la presencia tóxica de metales pesados. Los efectos en la salud humana de la polución del aire y las secuelas físicas y psicológicas de la contaminación acústica. Cómo las familias pueden minimizar su huella ambiental mediante el consumo responsable. La influencia en la salud del urbanismo, las edificaciones y las viviendas en función de su sostenibilidad. La protección de unos mares donde cada minuto se descarga el equivalente a un camión repleto de plásticos, una tendencia que de continuar así sumará más toneladas de ese residuo que de peces para 2050.

Hombre deprimido por la noche sintiéndose solo.
Hombre deprimido por la noche sintiéndose solo.tommaso79 (Getty Images/iStockphoto)

Abordan de qué forma el contacto respetuoso, no invasivo, con la naturaleza reduce la ansiedad o los estados depresivos, ayuda a prevenir algunas enfermedades no transmisibles y mejora el sistema inmunitario. La preocupante y creciente resistencia a los fármacos antimicrobianos. O cómo fenómenos climáticos cada vez más habituales, como las temperaturas extremas, las sequías o la degradación agrícola, causan o empeoran una larga lista de patologías, desde las respiratorias y cardiovasculares a las neurológicas o materno-infantiles.

Sugerencia de soluciones

Un médico tiene que ser claro, especialmente si la enfermedad es grave. Pero sobre todo debe aplicar la terapia adecuada. Los informes también movilizan desde un punto de vista positivo, con la acción como pilar de esa terapia. Explican, por ejemplo, hasta qué punto la lucha contra la degradación ambiental puede convertirse en la mayor oportunidad para la salud pública, del mismo modo que hoy la calidad sanitaria era impensable para la España de hace cuatro o cinco décadas. La propuesta de soluciones realista corre a cargo de algunos de los mayores expertos en cada materia, que completan los análisis técnicos.

La oportunidad dentro de la crisis: la lucha contra la degradación ambiental puede convertirse en la mayor ocasión de la historia para reforzar la salud pública

Un ejemplo es el informe de Alimentación Saludable y Sostenible, de 2020, con 26 artículos que recomiendan medidas contra el desequilibrio nutricional o el desperdicio de alimentos para reducir emisiones en el sector o entender la alimentación como un derecho humano. “En estos años de trabajo hemos establecido complicidades con investigadores e investigadoras de primera fila para sumar el mejor conocimiento y convertir los informes en una referencia”, apunta el director ejecutivo de Ecodes.

Últimas publicaciones

La saga continúa. A finales de octubre se publicó un quinto informe sobre Ruido y Salud, en el que también ha colaborado Gaes. Esta edición amplía los campos de estudio más allá del efecto en el bienestar humano, incluido el coste económico, y actualiza datos sobre la evolución acústica de Madrid, Barcelona y Valencia, además de otras grandes ciudades europeas y del resto del mundo. De nuevo la orientación útil: el informe concluye con 20 recomendaciones en favor de la calidad sonora. Por ejemplo, la plantación de defensas verdes en la trama urbana o el diseño de oasis que, además de reducir los decibelios, sustituyen el ruido por sonidos agradables, con la ayuda de la alta sensibilidad auditiva de algunas personas invidentes. Mas información en: https://dkv.es/corporativo/observatorios

El activismo se demuestra actuando

Si el Observatorio nace para promover el compromiso empresarial, su impulsora, DKV, está obligada a demostrar el suyo. Así, avanza en objetivos como plantar un millón de árboles en España hasta 2030 —desde un bosque que recuerda a las víctimas de la pandemia a la reforestación de los alrededores de Zaragoza—, y está muy cerca de compensar todas las emisiones desde su fundación en 1932, lo que la convertiría en la primera aseguradora climático-positiva, más allá de la neutralidad. Además, ayuda a calcular y reducir las emisiones de sus grupos de interés para ser, este año, la primera compañía en superar esa meta. Fija objetivos de responsabilidad ambiental para todos sus directivos, introduce el vector ambiental al calcular el riesgo en sus seguros de salud, cada año apoya a startups mediante una aceleradora y premia con 15.000 euros a la más destacada en salud humana y ambiental.

Hablábamos de hacer ruido para extender la conciencia sobre el impacto climático en el bienestar, pero la compañía también enfrenta un tipo de ruido negativo, las fake news que ceban el negacionismo, o al menos el relativismo. Es el objetivo de su iniciativa Menos bulos, más rigor científico.

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