_
_
_
_
_

El camión paga los platos rotos de la guerra comercial

Los fabricantes sufrieron una caída del 3% en 2019 y se espera que la compra de unidades de más de seis toneladas baje un 8%

Dani Cordero
Camiones en un peaje en la AP-7.
Camiones en un peaje en la AP-7. Albert García

"La flexibilidad será el nombre del juego”. Triton, la nueva cotizada del Grupo Volkswagen especializada en camiones, tenía claro a finales del año pasado cuál iba a ser el futuro de la industria de los camiones. Sus pedidos habían caído un 6% y la expectativas no eran buenas. Con aquella frase lanzada en noviembre, su consejero delegado, Andreas Renschler, avisaba de las turbulencias y de la necesidad de tener una cintura ágil tras presentar los resultados del tercer trimestre.

La sensación no era única de esta compañía, estrenada en Bolsa en junio pasado, nueva en el sector. “La situación de la demanda es ahora más débil y las órdenes de reserva para camiones han caído un 8% en los primeros nueve meses del año respecto a hace un año”, señalaba Henrik Anderson, presidente del grupo escandinavo Scania, con datos de su último informe trimestral. Y lo mismo ocurría para otro gigante: Daimler, que vio cómo entre julio y septiembre sus ventas se desplomaban un 7,8%. Conocedores de la situación, los principales fabricantes prepararon su inventario y minimizaron sus existencias para no acumular stocks que el mercado no está preparado para digerir.

Los camiones de gran tonelaje son actualmente la cara más visible del comercio internacional. En Europa son los responsables de tres de cada cuatro toneladas de mercancías que se mueven por el continente. Y ese porcentaje no ha variado en el tiempo, a pesar del creciente discurso que aboga por el ferrocarril para paliar las emisiones contaminantes, al menos hasta 2017, los últimos datos de Eurostat. Pero la desaceleración y las tensiones comerciales del último año han hecho mella en un mercado que se contrajo un 3% en unidades vendidas y que ha generado una actitud de “esperar y ver” entre los compradores europeos a causa del incierto futuro que se avecina, según Scania.

En Norteamérica las expectativas son de una bajada del 18% y de un alza del 10% en la India

La consultora especializada en automoción LMC es absolutamente pesimista respecto a lo que sucederá este año en el mercado. Prevé que la adquisición de camiones de más de seis toneladas caiga un 8% en todo el mundo, lo que, de confirmarse, se convertiría en la peor caída desde 2015. Probablemente sea la peor noticia para este sector desde 2016, cuando la Unión Europea condenó con una multa récord de 3.800 millones de euros a Daimler, DAF, Volvo-Renault, Iveco, MAN y Scania por pactar incrementos de tarifas en sus camiones durante 14 años.

Las previsiones son diferentes por regiones. Tras un año turbulento en Europa —provocado por el cambio de la normativa que afecta a los tacógrafos, que impulsó aumentos de ventas de hasta el 17% en el primer semestre para transformarse en una contracción del 13% en la segunda mitad del año—, se espera una reducción de entre el 4% y el 5% este año, derivada de la incertidumbre económica y del definitivo Brexit. El mercado chino se encuentra en peor situación a causa de las compras firmadas en los años anteriores y el nuevo contexto: la incertidumbre sobre los efectos de la batalla comercial con Estados Unidos, aunque parezca rebajada, y por las recientes regulaciones medioambientales impuestas por el Gobierno chino. LMC se refiere a su futuro con un “crecimiento anémico” en un país que dependerá más de la sustitución de la flota que de un aumento de ella. Y en Norteamérica las expectativas son de una contracción del 18%.

En la India se prevé un crecimiento en torno al 10%, después del desplome del 30% sufrido el año pasado, mientras que en Latinoamérica se estiman aumentos de dos dígitos de 2020 a 2022. Brasil es el país que comanda ese crecimiento.

El mercado de los camiones, mucho menos beneficiado por las compras de impulso de las que sí se benefician los turismos —y que igualmente están padeciendo en Europa—, se resiente de unos tristes datos de producción industrial y de un escaso crecimiento de la economía, vectores significativos del comercio mundial. Zita Zagan, la directora de estudios de vehículos comerciales de LMC, añade otro elemento: “Después de renovar y aumentar sus flotas en los últimos años, particularmente en mercados maduros, los operadores están ahora centrados en optimizar su utilización”.

Tras una etapa de estancamiento en el trienio 2014-2016, las ventas de camiones se dispararon. Aumentaron casi un 2% (de promedio en todo el mundo) en 2016 y volvieron a crecer un 3,5% un año después. Esas alzas fueron, sin embargo, mucho más significativas en China, la India y en Estados Unidos, países impulsores del crecimiento. En 2018 la mejora se repitió. Pero la desaceleración económica no solo puso freno al aumento de las ventas, sino que cayeron.

LMC estima que la flota de carga de camiones activa ha aumentado casi un 8% en 2019, incremento que no iría en concordancia con la demanda de transporte de mercancías, que se habría mantenido plana el pasado año. “Eso significa problemas en 2020 para el equilibrio de la oferta y la demanda. Con una capacidad de carga superior a la demanda de transporte, las tarifas de carga y los precios de los vehículos usados han caído”, afirma Zagan, que no cree que el escenario vaya a cambiar excesivamente este año.

Recuperación

Las previsiones de la consultora pasan por una mejora del mercado a partir de 2021, que se mantendrá en el tiempo hasta 2025. De hecho, consideran que la recuperación será rápida, con unas ventas que en 2022 ya serán similares al máximo de 2018 y que seguirán creciendo hasta aproximarse a los 3,5 millones de camiones dentro de un lustro.

“Europa”, explica Zagan, “tocará fondo durante el año que viene, al igual que Estados Unidos, donde se espera que la producción industrial se contraiga antes de recuperarse en 2021”. En su opinión, las perspectivas para Brasil siguen siendo fuertes, con una tendencia a fortalecerse aún más en lo que respecta a los impulsores macroeconómicos de la demanda de camiones, mientras que se espera que la India abandone su actual situación plana de una manera más significativa para 2021. Para ese año Rusia todavía no se habrá desprendido de la incertidumbre. “En general, la perspectiva del mercado global de camiones mejorará dentro de un año, en gran parte gracias a la recuperación de los impulsores macroeconómicos de la demanda de camiones”, opina la experta.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Dani Cordero
Dani Cordero es redactor de economía en EL PAÍS, responsable del área de industria y automoción. Licenciado en Periodismo por la Universitat Ramon Llull, ha trabajado para distintos medios de comunicación como Expansión, El Mundo y Ara, entre otros, siempre desde Barcelona.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_