La vivienda sigue batiendo previsiones

En las últimas semanas, varias estadísticas oficiales han puesto sobre la mesa cómo el mercado residencial está creciendo en el comienzo de este ejercicio a un ritmo intenso e incluso mejor de lo previsto. Una tendencia que se observa de forma notoria en las cifras que se refieren al número de transacciones, así como la solicitud de visados de obra nueva.

Según el Ministerio de Fomento, entre enero y marzo de este año la compraventa de viviendas se situó en 103.288 unidades, lo que supone un incremento del 20,7% respecto al mismo periodo de 2015. Más allá del repunte es importante destacar otra cuestión que confirma el buen arranque de 2016 y es que esa cifra se mueve en línea con el trimestre anterior, que tradicionalmente es el periodo del año donde más operaciones se cierran.

Para encontrar un primer trimestre del año con datos similares hay que remontarse a 2010, cuando las ventas alcanzaron las 107.079 unidades. De mantenerse ese ritmo, se batirían nuestras previsiones, ya que inicialmente en Solvia calculábamos que esta referencia alcanzaría las 450.000 viviendas en 2016. Semejante comportamiento muestran los visados, que escalaron un 57% interanual en el primer trimestre hasta las 16.782 solicitudes, la cifra más alta desde principios de 2011. La previsión de Solvia es que este año se concedan 70.000 permisos.

Aquí también cobra relevancia el comportamiento del suelo, dado que es la materia prima para el desarrollo de obra nueva. De acuerdo con Fomento, las operaciones de suelo urbano entre enero y marzo de 2016 subieron un 7,2% interanual. Como ya adelantamos en nuestro informe SolviaMarketview.es, el suelo registró en 2015 un cambio de tendencia porque se produjo un crecimiento real (+37%) de las transacciones cerradas por operadores como fondos, promotores o cooperativas. Un comportamiento que se mantiene en 2016. Según las estimaciones de Solvia, las ventas de suelo protagonizadas por estos operadores entre enero y marzo representaron más del 80% del total. Además, fondos, promotores o cooperativas han cerrado las operaciones de mayor volumen, lo que ha motivado que el valor total aumentase un 45,6% en el primer trimestre.

Esta intensa actividad del sector residencial no es más que el progreso lógico de un mercado que está remontando tras un fuerte ajuste, en un entorno de crecimiento económico con bajos tipos de interés y en el que el inmobiliario español continúa siendo atractivo para la inversión. La recuperación o normalización del mercado de la vivienda en España se inició el año pasado en las principales capitales pero ya en 2016 esa evolución positiva se ha extendido de forma general gracias a la mejora del empleo y de la confianza del cliente minorista.

José Peral es director de Comercialización y Marketing de Solvia.