El precio de la vivienda frena su caída

El mercado inmobiliario ha sumado este lunes un nuevo dato que apunta a que el sector se está estabilizando. O al menos, a que ha concluido la fase de desplome. En esta ocasión, la fuente estadística ha sido el INE, que ha publicado su índice trimestral sobre el precio de la vivienda libre. Este indicador arroja una caída del 1,6% en el primer trimestre de 2014 frente al mismo periodo del año anterior, lo que supone el recorte más moderado desde 2010 y contrasta con el ritmo de caída con el que acabó 2013, que todavía era del 7,8%.

El informe del INE, que llega tras conocerse la incipiente recuperación en la concesión de hipotecas, refuerza las tesis defendidas desde el FMI, el Banco de España o el Gobierno de que el final de la crisis está cerca. En su travesía por el desierto, los inmuebles suman ya seis años de caída de precios y seguirán aún un tiempo en terreno negativo, según los expertos. Lo que no quita que la recuperación haya permitido que los precios avancen en cuatro comunidades, entre ellas Madrid. Este hecho tampoco se había dado desde 2010.

Por tipo de inmuebles, el coste de la vivienda usada descendió un 1,7% en el primer trimestre de 2014 en tasa interanual; frente al desplome del 7,7% registrado entre octubre y diciembre de 2013. De su lado, el precio de la vivienda nueva cayó un 1,1%, respecto a la bajada del 7,8% del trimestre precedente.

José García Montalvo, profesor de Economía de la Universidad Pompeu Fabra, es de los que vaticinan el fin de la debacle del mercado inmobiliario en este 2014, aunque ello no evitará que los precios sigan sufriendo ligeras caídas. "Llevamos ya bastantes meses de mejora", añade tras recordar que los datos que publica el INE llevan entre uno y dos meses de retraso frente al momento en el que se realiza la transacción. Según comenta, el factor que mejor refleja esta aseveración es que los bancos han vuelto a abrir el grifo de las hipotecas. Los créditos, añade este profesor, crecen al 40%, aunque gracias a que se comparan con los meses en los que se han concedido menos créditos de la última década.

Otra de las razones que está detrás del cambio de tendencia es, en opinión de García Montalvo, "una demanda que está mucho más animada". A ello ha contribuido, continúa, la recuperación de las expectativas sobre el conjunto de la economía, lo que a su vez ha venido de la mano de los inversores extranjeros que desde mediados de 2013 están volviendo a apostar por el ladrillo español.

Sobre los precios, Fernando Encinar, jefe de estudios de idealista, augura simbólicamente que van a "estar arrastrándose por el suelo durante mucho tiempo" y discrepa de quienes aseguran que van a rebotar. Pese a ello, sigue dejando la decisión de si ha llegado el momento de comprar en manos del banco. Para quien no necesite pasar por la oficina y tenga suficiente dinero para comprar a tocateja, Encinar asegura que "hay muy buenas oportunidades en el mercado para negociar". "Hay mucho producto y muy bueno, es una de las pocas cosas positivas que ha dejado la burbuja inmobiliaria", resume.