Finaliza sin acuerdo el acto de conciliación de Tenneco

El acto de conciliación celebrado en el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) sobre el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción que afecta a la totalidad de la plantilla de la fábrica de Tenneco en Gijón ha finalizado sin acuerdo.

En declaraciones a Efe, el presidente del Comité de Empresa, Isaac Piñera, ha señalado que el acto de conciliación ha durado escasos minutos, dado que la dirección de la compañía se ha ratificado en su intención de cerrar la planta de amortiguadores y de no retirar el ERE, en vigor desde el pasado 31 de diciembre para los 220 trabajadores.

Tras el acto de conciliación sin acuerdo, la sala de lo Social del Alto Tribunal asturiano acogerá a lo largo de la mañana el juicio por la demanda colectiva presentada por el Comité contra el ERE.

Con motivo de la vista judicial, la plantilla de Tenneco se ha concentrado, junto con trabajadores de otras empresas asturianas afectadas por cierres o reestructuraciones, en las inmediaciones de la sede del TSJA.

Varios centenares de trabajadores se han reunido a partir de las 10.00 horas con algunas pancartas con el mensaje "Monroe no se cierra. Se defiende. Tenneco Solución" y "No nos moverán, Monroe".

Además de trabajadores de la fábrica gijonesa de amortiguadores, con camisetas negras serigrafiadas, han respaldado la protesta trabajadores de otras empresas, como las subcontratas de Hunosa, Liberbank, el Matadero de Noreña y los despedidos de la fábrica de armas de Trubia.

Los manifestantes han hecho sonar en repetidas ocasiones petardos colocados en la propia plaza de la Catedral así como en el lateral del edificio del TSJA.

La entrada de los representantes sindicales a la sede judicial se ha producido entre los aplausos del resto de concentrados, que aguardaban en el exterior del edificio.

La vista por la demanda colectiva se celebra después de que el propio TSJA aceptara imponer las medidas cautelares solicitadas por el Comité de Empresa de Tenneco sobre la maquinaria de la fábrica de Gijón, de modo que la dirección tiene prohibido moverla "hasta que se dicte sentencia definitiva en el proceso de impugnación colectiva de los despidos de los trabajadores de su plantilla".