El presidente del Banco Sabadell urge a reformar la financiación autonómica

El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, ha emplazado hoy al Gobierno a acometer sin dilación la reforma del modelo de financiación autonómica, ya que la inacción en este ámbito, ha advertido, "está llevando a consecuencias políticas poco agraciadas".

En una conferencia en la Cámara de Comercio de Sabadell, Oliu ha asegurado que la reforma de la financiación de las autonomías es "una necesidad" que el Ejecutivo de Mariano Rajoy "tiene que afrontar" este 2014 o, como muy tarde, en 2015.

No ha citado explícitamente al auge del soberanismo catalán, aunque ha avisado que "la no reforma" en este ámbito está generando una situación política que no es la más idónea para el país.

"Hay que abordar de manera frontal el sistema de financiación autonómica, una necesidad para 2014 o 2015", ha subrayado.

Según Oliu, España ha llevado a cabo profundas reformas estructurales en los últimos años, aunque sigue habiendo importantes proyectos reformistas pendientes de ejecutar, como es el caso de la financiación regional o de la fiscalidad.

El presidente del Sabadell ha recordado que la presión fiscal ha bajado en España del 45 al 38 %, aunque al mismo tiempo existe una sensación de "ahogo fiscal" entre las familias y las empresas, lo que refleja que "los esquemas de impuestos estén absolutamente alterados".

El banquero ha apostado por impulsar una reforma fiscal "de una manera racional y económica", de manera que permita incentivar el consumo y aumentar los ingresos del Estado, que tiene el difícil reto de cumplir con la consolidación fiscal marcada por Europa para el año 2016.

En materia de reformas, Josep Oliu también ha dicho que hacen falta "esfuerzos adicionales" en el ámbito laboral.

Ante unos 200 empresarios, Josep Oliu ha afirmado que España, tras seis años de intensa crisis, que ha comparado con un "gran tsunami", iniciará este 2014 "el retorno a la normalidad"

"Los grandes efectos de este tsunami han pasado y ahora quedan los destrozos y dos temas por hacer: acabar de limpiar y reedificar las cosas sobre una base diferente", ha señalado.

Oliu ha comentado que varios factores e indicadores invitan a pensar en una inminente pero lenta recuperación, como son la mejora del sentimiento psicológico, la buena evolución de las exportaciones, el incipiente crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) o la estabilización en la destrucción de empleo.

"Pero no tenemos la normalidad garantizada", ha advertido Oliu, que cree que la economía española se mantendrá vulnerable ante posibles 'shocks' de tipo político, económico, interno o externo, entre ellos el hecho de que el país logre mantener su "espíritu reformista".

Sobre la situación de Banco Sabadell, Oliu ha destacado que la entidad "ha cambiado sustancialmente" durante la crisis, en la que ha sido "uno de los grandes actores solucionadores" del sistema financiero, junto con CaixaBank y BBVA.

Desde 2007, ha explicado, el banco ha duplicado sus activos e inversión y casi ha triplicado sus depósitos. En cuanto a empleados, ha pasado de 10.234 a 16.900 trabajadores.

"La crisis nos ha posicionado en el mercado nacional de una manera diferente y ahora tenemos una cuota de mercado del 14 %, cuando teníamos un 4 % hace cinco años", ha apuntado.

Oliu ha comentado asimismo que Banco Sabadell inicia este 2014 un nuevo plan de negocio trianual que estará basado en la rentabilidad, la transformación tecnológica y comercial y en la internacionalización.

Aunque el banco "no baja la persiana de las adquisiciones", reconoce que "ha cambiado el chip" y que su foco de actuación ahora será "única y exclusivamente la rentabilidad".

En cuanto a la actividad inmobiliaria de la entidad, Oliu ha avanzado que la inmobiliaria Solvia ha vendido en 2013 unas 19.000 viviendas, frente a las 16.000 de 2012, por un importe cercano a los 3.000 millones de euros.