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CRISIS PORTUGAL

El Gobierno luso se marca como objetivo "ofrecer esperanza" a los portugueses

El ministro de Estado y Desarrollo Regional, Miguel Poiares Maduro. EFE/Archivo
El ministro de Estado y Desarrollo Regional, Miguel Poiares Maduro. EFE/ArchivoEFE

Cuando se cumplen dos años de su llegada al poder, el Gobierno conservador luso se marca como objetivo prioritario poder "ofrecer esperanza" a los portugueses durante el resto de su mandato, que finaliza en 2015.

Así lo aseguró hoy el ministro adjunto al primer ministro, Miguel Poiares, quien actuó de portavoz del Ejecutivo ante los periodistas nada más terminar el Consejo de Ministro informal y extraordinario celebrado hoy en el municipio luso de Alcobaca, a 120 kilómetros de Lisboa.

Tras este encuentro, de carácter marcadamente simbólico, el Gobierno del líder conservador luso Pedro Passos Coelho hizo público su deseo de lograr de aquí hasta el final de su mandato una economía más competitiva y una mayor cohesión social.

"Este Ejecutivo consiguió estabilizar la grave situación financiera que presentaba Portugal y ahora nos encontramos en un momento de ofrecer esperanza a los ciudadanos aunque basada en la verdad y en el realismo", precisó Poiares.

Durante su reunión de hoy, los ministros debatieron sobre la reforma del Estado que debe presentar Portugal el próximo mes de julio a instancias de la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI), los organismos que le concedieron en 2011 el rescate financiero.

Esta reforma debe lograr unos ahorros en las arcas públicas por valor de 4.700 millones de euros e incluirá previsiblemente ajustes en las plantillas de funcionarios y en el sistema de pensiones.

El corte del gasto público es imprescindible para que Portugal cumpla con las metas de reducción del déficit acordadas con la UE y el FMI, establecidas en el 5,5% para 2013 y el 4% para 2014.

En este sentido, el ministro adjunto al primer ministro aseguró hoy que una hipotética revisión del objetivo para el próximo año "no es una cuestión encima de la mesa en este momento" pese a que diferentes expertos y analistas consideran improbable que Portugal pueda alcanzarlo.

Poiares reaccionó así a una noticia publicada en medios lusos que confirmaba la existencia de las primeras reuniones entre miembros del Ejecutivo portugués y la Comisión Europea para lograr una nueva flexibilización.

La posibilidad de alterar estas metas "dependerá siempre de cambios en la coyuntura económica en el continente y deberá ser negociada con los socios europeos", detalló.

El último organismo en agravar sus previsiones económicas para Portugal fue la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), y cuyas estimaciones prevén una mayor recesión de la esperada inicialmente para el país y el incumplimiento de sus objetivos de déficit.

El Ejecutivo luso calcula para este año un retroceso de la economía del 2,3% y un desempleo que supere el 18%.

Los conservadores cumplen estos días dos años desde su llegada al poder, un período marcado por la obligación de cumplir con el severo programa de austeridad acordado con los organismos internacionales a cambio de su ayuda financiera.

Los numerosos ajustes y recortes aprobados desde entonces han afectado a la popularidad de Passos Coelho, quien en los sondeos está por debajo del líder de la oposición, el socialista Antonio José Seguro.

Hoy mismo, tanto Seguro como el resto de partidos de izquierda volvieron a criticar al primer ministro y le reclamaron la convocatoria de elecciones anticipadas.

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