Las empresas españolas captan 7.250 millones con emisiones de deuda en 2013
Las empresas españolas han captado 7.250 millones de euros en los mercados de deuda en las dos primeras semanas de 2013, gracias a un rally de exitosas emisiones alentadas por la caída de la prima de riesgo y el hambre de rentabilidad de los inversores extranjeros.
Los mercados han recibido el nuevo año con un optimismo que ha relanzado las bolsas mundiales y ha hecho descender la prima de riesgo de España -indicador que mide la confianza en la deuda soberana- a niveles de marzo pasado, en torno a los 330 puntos.
Con el grifo del crédito bancario aún muy restringido, las grandes compañías españolas han aprovechado la coyuntura para salir a buscar financiación a los mercados de capitales, que durante 2012 cerraron sus puertas a los valores españoles y obligaron a muchas a recurrir a ampliaciones de capital.
Este año, sin embargo, les han recibido con los brazos abiertos, a la vista de los resultados obtenidos en estas dos primeras semanas de 2013.
Aquellas que ya han cerrado sus libros de colocación -BBVA, Banco Popular, Telefónica, Gas Natural, Caixabank, Bankinter, Banco Sabadell y Red Eléctrica- han obtenido, en conjunto, 7.250 millones de euros en deuda corporativa, con rentabilidades incluso por debajo de los tipos de interés de los bonos soberanos.
Todas las emisiones han registrado demandas muy superiores a la oferta -hasta diez veces en alguna de ellas- y han sido suscritas principalmente por inversores internacionales, especialmente fondos de inversión, que han adquirido entre el 70 % y el 90 % de la deuda.
El primero en emitir fue BBVA, que captó 1.500 millones de euros en deuda sénior -aquella que tiene como única garantía a la propia entidad- a cinco años, con una rentabilidad del 3,75 %; lo que animó a otras entidades financieras y grandes empresas del IBEX 35 a seguir su estela.
Entre los bancos, Caixabank ha logrado adjudicar 1.000 millones de euros en bonos sénior a tres años con un cupón del 3,25 %, seguido por Sabadell, que colocó otros 1.000 millones en cédulas hipotecarias a cinco años con un interés del 3,38 %.
Por su parte, el Banco Popular, captó 750 millones en una emisión de deuda sénior a dos años y medio con una rentabilidad anual del 4 %, mientras que Bankinter colocó 500 millones en cédulas hipotecarias a tres años y medio.
En cuanto a las empresas, Telefónica ha conseguido colocar esta semana 1.500 millones de euros en bonos a diez años con un interés del 3,987 %, el más bajo de su historia a este plazo; en tanto que Gas Natural Fenosa captó 600 millones de euros en una emisión de bonos a diez años con un cupón del 3,875 %, y Red Eléctrica adjudicó 400 millones en bonos a nueve años al 3,875 %.
Según los expertos consultados por Efe, estos resultados eran impensables hace seis meses, cuando la prima de riesgo de la deuda soberana de España, en estrecha relación con el riesgo atribuido a la deuda privada, llegó a sobrepasar los 600 puntos básicos, lo que generó una gran aversión a todos los valores españoles.
El analista de ATL Capital Félix López opina que el segundo factor de éxito de estas emisiones corporativas ha sido el alto nivel de liquidez que existe en los mercados de renta fija, que ha llevado a los inversores a decantarse por los títulos de España, uno de los pocos países desarrollados que ofrece rentabilidad en un momento de tipos mundiales casi nulos.
"A pesar de que los intereses con que están emitiendo estas empresas son históricamente bajos, si los comparamos con sus homólogas europeas están bastante por encima, eso está generando la demanda internacional", señala Félix López.
Pese a la gran acogida de estas subastas, los expertos creen que es pronto para avanzar un cambio de tendencia en 2013. "No podemos hablar de apetito por el riesgo, sino más bien de una situación de neutralidad, en la que se deja atrás la aversión a España", afirma el experto del Instituto de Estudios Bursátiles Miguel Ángel Bernal.
Que la racha de éxito continúe dependerá, según el analista de Citi, José Luis Martínez Campuzano, de cómo afecten a los mercados los factores de riesgo que deberán afrontar en 2013.
Las elecciones italianas y alemanas, la resolución de la segunda parte del "precipicio fiscal" en Estados Unidos y de la crisis del euro, la consecución de los objetivos de déficit por parte del Gobierno español y el desarrollo de las emisiones del Tesoro, son los principales hitos que determinarán el rumbo de los mercados.
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