El antiguo consejo del Banco de Valencia cobró 1,7 millones pese a las pérdidas

El consejo de administración del Banco de Valencia, entidad intervenida por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) el pasado noviembre por su delicada situación financiera, recibió una remuneración de 1,7 millones de euros en 2011 hasta su destitución, acordada por el Banco de España ese mismo mes.

Los nuevos administradores del banco publicaron hace apenas unos días que el Banco de Valencia perdió 887 millones durante el pasado ejercicio.

Según consta en el informe de gobierno corporativo que la entidad ha trasladado hoy a la CNMV, los 18 consejeros que han salido de Banco de Valencia tras su intervención, realizada con anterioridad a la reforma financiera y que restringe los pagos a los directivos de entidades con ayudas públicas, "no tenían convenida indeminización alguna". Así, añade el documento, sus remuneraciones corresponden a dietas y a gratificaciones estipuladas en los estatutos de la entidad.

La gestión del banco está ahora en manos del FROB como administrador único. El organismo ha nombrado a tres ejecutivos que realizan estas funciones de manera mancomunada que no reciben remuneración alguna de la entidad.

Banco de Valencia, participada por la matriz de Bankia, Banco Financiera y de Ahorro (BFA), cerró 2011 con unas pérdidas netas de 887 millones una vez actualizado el valor de los activos inmobiliarios que tenía en sus balances y de los inmuebles canjeados por créditos impagados.

Estos números rojos han reducido los recursos propios de la entidad, que en 2010 se situaban en 1.225 millones, a apenas 325 millones, lo que equivale a un recorte de 899 millones.

Tras su intervención en noviembre, el FROB acordó inyectar 1.000 millones de euros para reforzar sus niveles de capital, al mismo tiempo que le concedió una línea de crédito de otros 2.000 millones con vistas a garantizar su liquidez.