Las cajas pedirán al Estado la mitad del capital que necesitan para los nuevos mínimos

El Banco de España ya cuenta en su poder con las estrategias de los ocho grupos de cajas y cuatro bancos que no alcanzan los requisitos de capital que el supervisor reclamará a las entidades tras el verano. En concreto, tres de ellas -Banco Base, NovacaixaGalicia y CatalunyaCaixa- solicitarán dinero al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) por unos 7.000 millones de euros, mientras el resto intentará captar el capital que necesitan o bien saliendo a Bolsa, como es el caso de Bankia, Banca Cívica y Mare Nostrum, o por sus propios medios, como los bancos que no cumplen de momento con los mínimos que el organismo presidido por Miguel Fernández Ordóñez exigirá a partir del 30 de septiembre. Entre todas, el antiguo instituto emisor calcula que se precisan algo menos de 15.000 millones para cumplir los nuevos requisitos.

En concreto, según los planes trasladados por las entidades al Banco de España, según informan en fuentes del mercado, el grupo liderado por Cajastur y la CAM -Banco Base- va a duplicar la cifra inicial de dinero que pedirán al Estado hasta los 2.800 millones de euros, aunque todavía mantienen discrepancias en torno a los términos de la fusión. La unión entre las cajas gallegas, por su parte, reclamará hasta 2.600 millones, aunque intentará captar parte de ellos de capital privado. CatalunyaCaixa necesita unos 1.700 millones de euros del FROB mientras, Caja España-Duero se fusionará con Unicaja para cubrir los 463 millones que le exige el supervisor sin necesidad de recurrir al dinero de los contribuyentes.

El objetivo de estas ayudas es permitir a las cajas alcanzar el porcentaje de capital básico hasta el 10% que el regulador exige a las entidades que no cuenten con una presencia significativa de inversores particulares o una alta dependencia a la financiación exterior. Al resto, le bastará con cumplir con el 8%.

En esta segunda situación están el resto de cajas señaladas por el Banco de España que de momento no llegan a los nuevos mínimos pero que, en lugar de acudir al FROB, han confirmado sus planes de salir a Bolsa: Bankia, el banco creado a partir de la unión entre Caja Madrid, Bancaja y otras cinco entidades; Banca Cívica, la entidad pilotada por Caja Navarra y Cajasol; así como Mare Nostrum, en cuyo seno se encuentran Caja Murcia, Caixa Penedès, Caja Granda y la balear Sa Nostra. Entre todos, deben conseguir 3.280 millones.

En un estadio intermedio se encuentra la segunda fusión de cajas catalanas, Unnim, que precisa 568 millones. Unnim, al igual que Caja España-Duero también intentará sumarse a otras cajas (se habla de Banca Cívica, Ibercaja, Unicaja o Banco Base, si rompe con la CAM), aunque fuentes del mercado creen probable que termine pidiendo dinero al Estado, con lo que la cifra total que debería inyectar en el sector ascendería a 7.000 millones. También podrán combinar los inversores privados y el FROB, para evitar ser nacionalizados y perder el control de la caja. La cuestión clave será el precio que el mercado o los expertos contratados por el supervisor ofrezcan por cada caja..