Solo el 10% de los fondos de la UE llega a las regiones más pobres

Miles de millones de euros de fondos que la Unión Europea destina a las regiones más pobres nunca llegaron a buen puerto. Exactamente, tal como publica hoy el tabloide británico Financial Times, un 90% de los 347.000 millones de euros de los denominados fondos estructurales y de cohesión están sin utilizar porque los gobiernos de los países miembros atraviesan un periodo de turbulencias presupuestarias y no consiguen aportar las sumas correspondientes. Aportar esas sumas es una condición exigida por Bruselas para obtener esas ayudas.

Así pues, de esos 347.000 millones de euros asignados para un periodo de siete años (hasta 2013, desde que se concedieron en 2006, en vísperas de la crisis), la UE solo ha desembolsado un 10%, esto es, 35.000 millones. Según el FT, que cita documentos oficiales, el programa de concesión de esos fondos también está envuelto en un mar de irregularidades y de prácticas abusivas.

En el rotativo se pone de relieve la burocracia y la ausencia de control en los fondos estructurales y en los fondos de cohesión. Ambos son las herramientas financieras de las que dispone la Comisión para gestionar las ayudas a las zonas de la UE que más lo necesitan.

Aprobadas antes de que la crisis arreciase, las directivas de asignación de fondos no previeron en 2006 los ajustes presupuestarios que actualmente llevan a cabo los países miembros. Estas directivas impiden a la UE desbloquear tales ayudas excepto si las regiones o países destinatarios de las mismas aportan su parte (que viene a ser la mitad de lo que reciben). De hecho, un estudio encargado por la Comisión Europea el mes pasado ya planteaba este problema.