Más cuarteles a la venta

Albergues rurales, hoteles de lujo, viviendas para jóvenes, residencias para mayores o cualquier otro equipamiento que se tercie. Por pedir que no quede. Hasta un aparcamiento público demandan los vecinos de la localidad vizcaína de Arrigorriaga en el solar donde estaba el cuartel de la Guardia Civil, aunque la petición no podrá ser atendida. Cualquier uso es válido para dar una nueva vida a los cientos de antiguos cuarteles y solares del instituto armado y, en menor medida, de comisarías de policía, que han dejado de ser operativos.

Formaron parte del paisaje urbano y rural, pero la reestructuración de las actividades, por la aparición de otros cuerpos policiales y la apertura de fronteras en la Unión Europea, los fue dejando en desuso para aglutinar una notable bolsa inmobiliaria cuyas propiedades se ofrecen, en primera instancia, a Gobiernos autónomos y Ayuntamientos y, si son rechazados, en pública subasta al mejor postor. Si tras varias pujas no se adjudican, se venden directamente con descuentos de hasta el 20%.

Desde mayo de 1999 -con José María Aznar de presidente del Gobierno y Jaime Mayor Oreja, ministro del Interior-, inició su actividad la Gerencia de Infraestructuras y Equipamiento de la Seguridad del Estado (GIESE), y hasta el pasado 31 de diciembre de 2008 se han vendido 277 inmuebles por 166,80 millones de euros, reinvertidos en la construcción de nuevas dependencias.

Un proceso que también se está viendo afectado por la crisis económica. "La última subasta quedó desierta. Los Ayuntamientos dicen que sí, que les interesa, pero a la hora de la verdad, no acaban de decidirse. No rechazan la compra definitivamente, pero la paralizan. Tenemos varias operaciones que han quedado aplazadas", comenta el general de brigada y secretario general de la GIESE, Gonzalo Jar. "Antes ofertábamos cinco subastas al año y en 2008 sólo tres, y sin adjudicar", añade el general. Entre 2007 y 2008 tan sólo se han ingresado 28,7 millones de euros, muy lejos de los casi 37 obtenidos en 2006. Para la subasta de inmuebles en vigor, (http://www.mir.es/SES/GIESE/ Licitaciones/Subastas_próximas/), no hay fecha fijada.

El estado general de estos inmuebles no es homogéneo. Algunos se encuentran en estado ruinoso, y su demolición es la única salida. Los abandonados recientemente lucen mejor. Una rehabilitación serviría para destinarlos a otros usos. Tomada la decisión de que un inmueble deja de ser operativo se procede a su tasación y se ofrece a los Ayuntamientos.

En esta fase de negociación se halla una de las propiedades más singulares, el torreón de San José, con su planta tronco piramidal de 27 metros de altura, situado en un extremo de la isla de Tabarca, a tres millas de Santa Pola y a 11 de Alicante. Un bien protegido sobre el que desde hace dos años mantiene contactos el Ministerio del Interior con el Ayuntamiento de Alicante.

Cláusula en la isla de Tabarca

"Parece que ahora, con la nueva corporación, existe mayor interés. Estamos negociando la firma de un convenio, en el que además del torreón entrarían otras dependencias, como el edificio de la Comandancia", comenta Gonzalo Jar. En un principio fue tasado en unos 600.000 euros, pero "era un precio de entonces. Ahora, ya veremos", señala el general sin entrar en más detalle.

En cuanto a las restricciones de uso y para evitar tentaciones especulativas, cuando Interior vende o cede a los Ayuntamientos algún inmueble existe una cláusula de mantener, durante 10 años, la calificación que el inmueble tenga. "Se trata de impedir que si dicha calificación es, por ejemplo, para uso dotacional, no vengan al día siguiente y lo modifiquen para construir viviendas", comentan desde la GIESE.

Es la razón por la que el Ayuntamiento de Arrigorriaga acaba de rechazar la petición vecinal de construir un aparcamiento sobre el solar del que fue hasta 2005 cuartel de la Guardia Civil. "Tenemos que respetar el acuerdo con Interior de mantener el espacio como zona verde. Si después fuera necesario un equipamiento, el aparcamiento o cualquier otro, ya se vería", indica Marisol Ibarrola, concejala de Seguridad Ciudadana en este municipio vizcaíno. Los inmuebles rechazados por las Administraciones se sacan a subasta. Y si siguen sin venderse, se ofrecen en venta directa a particulares. Al mismo precio de 224.000 euros, que se pedía en 2007, como ocurre con el cuartel de Quatretonda, en Valencia, o con una rebaja del 12% en el caso del de Salvaleón, en Badajoz.

Nuevos huéspedes

Una vez adquiridos los inmuebles, sus nuevos usos son diversos. Desde el hotel de lujo construido en plena Vía Layetana de Barcelona al Centro Fitoturístico El Cornical, en la localidad almeriense de Rodalquilar o los albergues y las casas rurales en pueblos del interior, cuya apertura ha llevado a visitantes que de otra manera difícilmente se hubieran dejado caer por allí. Es el caso de los establecimientos abulenses de Mingorría y Peguerinos, o del pacense de Peraleda del Zaucejo, donde cuentan los lugareños que en el antiguo cuartel estuvo detenido Eleuterio Sánchez El Lute y que fue abatido tras un intento de fuga.

Otros particulares han optado por vender los cuarteles. El comprador de La Codosera en Badajoz lo ofrece por 120.000 euros, con proyecto incluido para casa rural de 14 habitaciones. También cabe la posibilidad de demoler el inmueble y levantar dos viviendas con patio interior y con frente a dos calles.