Afloran 1.5 billones de pesetas por el 'efecto euro'

La desaparición de la peseta y la llegada del euro ha hecho aflorar 1,5 billones de pesetas de dinero efectivo, de los que 800.000 millones de pesetas se han destinado a la compra de viviendas, según estimaciones facilitadas hoy por Miguel Sebastián, director del Servicio de Estudios del BBVA.

Sebastián, junto con Ignacio San Martín, experto del mercado inmobiliario del Servicio de Estudios del BBVA, han presentado hoy en rueda de prensa la revista Situación Inmobiliaria, en la que se apunta que el precio de la vivienda alcanzará el nivel máximo en el primer trimestre de 2002 y se mantendrá estable a partir de esa fecha, aunque puede incluso bajar moderadamente en 2003.

Según Sebastián, que ha señalado que esos datos de dinero que sale a la luz por el efecto euro pueden aumentar a medida que se conozcan los datos sobre dinero efectivo en circulación, la desaparición de la peseta ha hecho que aflore dinero en los últimos años y que se adelanten decisiones de consumo a este año, por lo que en 2001 habrá más operaciones de compra de viviendas de las previstas y en 2002, menos.

Los datos del BBVA apuntan a que en 2001 unas 100.000 compras de viviendas se deben al efecto euro, lo que representa alrededor de un 12% del total de las transacciones inmobiliarias, que sumarán este año unas 900.000. Por este mismo efecto, Sebastián cree que en 2002 habrá 75.000 transacciones inmobiliarias menos.

Según las estimaciones del BBVA, el fin del efecto euro y la peor situación económica llevará a que en 2002 se registren unas 675.000 transacciones de viviendas, lo que llevará a una estabilidad del precio de la vivienda a partir del primer trimestre de 2002 que se mantendrá durante todo el año. Sebastián ha reconocido que el efecto euro ha retrasado el estancamiento del precio de la vivienda.

El Servicio de Estudios del BBVA estima que los precios de la vivienda crecerán este año una media del 14%, y alcanzarán en el primer trimestre de 2002 el nivel máximo (185.000 pesetas por metro cuadrado construido de media, frente a 171.400 pesetas en junio de este año), para mantenerse estables durante el resto del año.

En cuanto a la accesibilidad a la vivienda, San Martín ha indicado que la capacidad de financiación de las familias ha mejorado por la reducción de los tipos de interés, pero ha matizado que los aumentos de los precios de las viviendas han compensado este efecto, impidiendo el descenso del esfuerzo financiero que tienen que realizar para comprar una vivienda.

Según el BBVA, el esfuerzo para acceder a una vivienda se mantendrá en el 43%-43,5% del salario medio en 2002. A su juicio, en los próximos meses habrá reducciones adicionales de los tipos de interés, y en 2002 podría haber un ligero repunte de los tipos oficiales, hasta el 3,75% a finales de año, que se reflejaría en alzas en los tipos de interés hipotecarios.

Por lo que se refiere a la construcción de viviendas, el Servicio de Estudios del BBVA cree que en 2002 sufrirá una importante desaceleración, tras la registrada este año. De acuerdo con sus cálculos, de las 500.000 viviendas iniciadas este año, un 17% menos que en 2000, se pasará a 375.000 en 2002, con una caída del 25%.