Los gasolineros afirman que el fin de la 'súper' perjudicará a los operadores independientes
Los pequeños distribuidores se quejan de que los grandes operadores se niegan a suministrarles el carburante sustitutivo
La nueva gasolina con aditivos que sustituirá, a partir del 1 de agosto, a la súper con plomo de 97 octanos no será significativamente más cara que la utilizada hasta ahora, a pesar de que su coste de producción es superior, según fuentes del sector.
El plazo máximo fijado por la Unión Europea (UE) para la desaparición de las gasolinas sin plomo era el 1 de enero de 2000, pero ante la situación de algunos mercados, la Comisión Europea concedió una moratoria a España, Italia y Grecia hasta el 31 de diciembre de 2001.
El presidente de la Confedración Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (CEEES), Juan Miguel Prats ha señalado que la nueva gasolina sólo se fabricará en España, lo que afectará a estos empresarios, dado que "parece que los operadores dominantes se niegan a suministrarles el nuevo combustible". Como solución, ha apuntado a la posibilidad de que las compañías independientes aditiven el carburante en la propia estación de servicio.
Según Prats, los usuarios tendrán problemas en el futuro para encontrar la nueva gasolina en las estaciones de menor tamaño, que tienen pocos tanques de almacenaje, porque, en caso de faltarles espacio, los empresarios optarán por comercializar la de 98 octanos, cuyo consumo aumentará en los próximos años.
El presidente de CEEES ha asegurado que las petroleras han ido agotando las existencias de súper, un combustible que dejaron de producir en torno al mes de marzo. Así, Prats considera que las estaciones de servicio cuentan ya con suficiente disponibilidad del nuevo carburante.
A principios de 2000, aproximadamente un 50% del parque automovilístico español (9 millones de vehículos) sólo admitía gasolina súper de 97 octanos, un porcentaje muy superior al que entonces registraban el resto de los países europeos.
Afecta a cuatro millones de coches
En la actualidad, en torno a cuatro millones de vehículos sólo pueden utilizar gasolina súper de 97 octanos, según fuentes del sector automovilístico. Hasta el mes de abril, el consumo de la súper de 97 octanos representaba el 28,5% del total de las gasolinas, frente al 71,5% que suponían las gasolinas sin plomo de 95 y 98 octanos.
Según la Asociación de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP), las estaciones de servicio no tendrán que reformar sus instalaciones para despachar la nueva gasolina sin plomo que sustituirá a la súper de 97 octanos.
Por su parte, las organizaciones de consumidores se han mostrado de acuerdo en que la desaparición de la gasolina súper se adelante cinco meses, siempre que exista ese día un carburante de sustitución, no suba el precio y se informe con antelación a los usuarios.
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