Margallo duda de la viabilidad de Casa Mediterráneo

José Manuel García Margallo, ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, supeditó ayer en Xàbia el futuro de Casa Mediterráneo a su financiación. "Vamos a buscar sinergia y encontrar el dinero, y voy a intentar por todos los medios que no desaparezca, pero eso va a depender de si somos capaces de encontrar financiación", declaró a Efe el titular de Exteriores al término de una visita oficial a Ayuntamiento de Xàbia. García Margallo no descartó incluso buscar financiación privada para el ente "dadas las restricciones presupuestarias de todos los ministerios", puntualizó.

Casa Mediterráneo [organismo cuyo objetivo es fomentar las relaciones culturales y sociales entre los países de la ribera del Mediterráneo] fue una apuesta personal del anterior presidente de Gobierno, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero. La sede central del ente se ubica en Alicante (en el antiguo edificio de la estación de Murcia) y cuenta con subsedes en Benidorm y Xàbia. Para la puesta en marcha del organismo se creó un consorcio integrado por el Gobierno, la Generalitat Valencia y los tres Ayuntamientos mencionados. Las obras de la sede central no están todavía concluidas.

Además de buscar fórmulas para mantener activa la entidad el proyecto, Margallo también precisó "que hay que ver qué contenido se le da".

Embajadas

García Margallo también se refirió a la iniciativa de su Ministerio de concentrar en las embajadas españolas a los funcionarios autonómicos y de trasladar a los representantes nacionales a las delegaciones de la UE. "Estamos en un momento de vacas flacas y de restricciones", aseguró. El ministro defendió su propuesta de que las comunidades autónomas destaquen a sus funcionarios a las embajadas de España para "defender los intereses" regionales.

Además, indicó que la medida abarcaría no sólo a las representaciones o a las proyecciones exteriores en el campo empresarial y económico sino también a las culturales. "Se trabaja en cómo repartir los gastos y se busca una ubicación física en las embajadas de España para ubicar a los representantes de las comunidades autónomas", manifestó. Según Margallo, son ya varias las comunidades autónomas que se han mostrado a favor de esta propuesta y que sólo una -Cataluña- ha renunciado.