Fomento transforma en autovía la antigua N-332 entre Sollana y Sueca

El Ministerio de Fomento puso ayer en servicio el tramo de la autovía A-38 que discurre entre las localidades valencianas de Sollana y Sueca y en el que se han invertido más de 44 millones de euros. Según el comunicado del ministerio, los 8,2 kilómetros puestos en servicio se suman a los otros dos tramos de la A-38 ya en funcionamiento en la provincia de Valencia: la variante de Sueca y el tramo Xeresa-Gandia.

Los más de 20.000 vehículos diarios que circulan actualmente por la carretera N-332 entre Sueca y Sollana "se verán beneficiados por una actuación que mejora considerablemente" la capacidad y la seguridad de la vía. Las obras se han llevado a cabo en un tramo de 8,2 kilómetros que discurre por los municipios de Sollana, Albalat de la Ribera y Sueca, desde la variante de Sueca hasta la conexión de la N-332 con la autopista AP-7.

La sección para cada calzada de la autovía está compuesta por dos carriles de 3,5 metros de ancho, arcenes exteriores de 2,5 metros y arcenes interiores de un metro, además de una mediana reducida.

Toda la obra está ejecutada en terraplén con una altura media de 2,5 metros sobre el terreno, salvo en las inmediaciones de la conexión con la variante de Sueca, donde el terraplén tiene cerca de un metro de altura.

La rasante se ha construido condicionada por las obras para facilitar el desagüe de las avenidas del Júcar, de manera que se han diseñado 10 viaductos dobles con una capacidad de desagüe de 2.228,7 metros cúbicos por segundo y una longitud de 967 metros. Dado que seis de los 8,2 kilómetros de la autovía están incluidos en el parque natural de la Albufera, se ha contado en todo momento con la colaboración de la dirección del parque para la ejecución de las obras con la menor afección posible al medio natural.