Empresarios y políticos piden que la CAM siga vinculada a Alicante

La venta de la intervenida Caja Mediterráneo (CAM) al Banco de Sabadell fue encajada ayer por el poder político, empresarial y sindical de manera positiva. No obstante, todos incidieron en la necesidad de que el nuevo dueño de la caja mantenga la vinculación territorial con la provincia de Alicante y el actual nivel de empleo de la entidad. "Este paso [la venta de la CAM] ha despejado incógnitas y servirá para reactivar y dinamizar el crédito", señaló la patronal alicantina, Coepa, mediante un comunicado.

El Consell, a través de su presidente, Alberto Fabra, abundó en ese aspecto: "He hablado con Josep Oliu [presidente del Banco de Sabadell] y se ha comprometido a mantener la misma línea de la CAM tanto con el territorio de la provincia de Alicante como con su tejido productivo". "Es una buena noticia para todos saber que están garantizados y consolidados tanto los depósitos como los acreedores", añadió el jefe del Consell.

Obra social

Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio de Alicante, José Enrique Garrigós, pidió a los responsables del Banco de Sabadell que "hagan un esfuerzo para mantener la labor de la obra social de la CAM". El empresario también resaltó la "cercanía" que tradicionalmente ha mantenido el Banco de Sabadell con los pequeños y medianos empresarios.

Mientras, la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, también calificó la venta como una buena noticia: "Existen garantías serias de que se mantendrán los puestos de trabajo, de la vinculación de la entidad con Alicante y, además, se pone fin a un periodo de incertidumbre".

Los sindicatos de la CAM, salvo UGT, también aplaudieron la operación, aunque se mostraron "expectantes" ante el futuro laboral de la actual plantilla. UGT criticó que el Banco de España "regale" la caja sin pedir responsabilidades a los antiguos gestores de la entidad.