La lluvia frustra la protesta del 15-M en la plaza de Catalunya

Una veintena de indignados volvieron ayer durante cerca de una hora a la plaza de Catalunya. El movimiento 15-M llamó a los ciudadanos a regresar a los lugares que ocuparon hace medio año, a modo de protesta por la decisión de la Junta Electoral de impedir que se manifestasen en las plazas en la campaña electoral. Pero la lluvia y la matización del veto de la junta (no podrán coincidir con actos electorales) frustraron la iniciativa: tanto en la madrileña Puerta del Sol como en la plaza de Catalunya se reunió poca gente.

Citados a las siete de la tarde, apenas una veintena de personas se dejaron ver en la plaza, paraguas en mano. La convocatoria inicial incluía la celebración de una asamblea para decidir, entre otras cosas, si acampaban de nuevo. Además, estaba previsto que instalasen un punto de información permanente otra vez en el lugar.

Debido a la lluvia, los indignados no pudieron hacer ninguna de las acciones planeadas y pospusieron para el fin de semana la instalación del punto de información. Buena parte de ellos se trasladó al vestíbulo del tren y metro de la plaza, donde elaboraron pancartas.

A las 22.30, debía proyectarse en la plaza el documental Indignados, dirigido por Antoni Verdaguer, que narra la trayectoria del movimiento. La lluvia les obligó a exhibirlo en el Antic Teatre de Ciutat Vella. A medianoche, habían organizado una pegada de carteles simbólica, como hicieron los partidos el jueves. Eso si la lluvia no frustraba de nuevo sus planes.