Regreso a Granada: de Cruyff a Messi

A Los Cármenes ya no se va en tranvía ni se entra por una puerta de estilo arabesco porque el viejo estadio fue derruido en 1995 y se convirtió en un aparcamiento. Pero de aquel Granada de los años setenta del siglo pasado quedan recuerdos imborrables para el fútbol español y el Barça porque a ambos clubes les une una efeméride: contra el equipo andaluz debutó Johan Cruyff con la camiseta azulgrana. Eso sí, en el Camp Nou. El Holandés Volador, en cualquier caso, estaba en la cancha granadina la última vez que asomó el Barça por aquel campo, al que, dicen, daba miedo acercarse.

La última vez que el Granada recibió al Barça fue el 15 de febrero de 1976, el entrenador azulgrana era Hennes Weisweiler y su conjunto ganó (0-2) con goles de Rexach y Marcial. Los barcelonistas formaron con Mora; Tomé, Migueli, Costas, Albaladejo; Marcial, Neeskens, Asensi; Rexach, Cruyff y Fortes. Los rojiblancos, con Puente; Calera, Ederra, Fernández, García Blanco; Grande, Santi, Angulo; Megido, Lis y Millar. Les dirigía Miguel Muñoz y al final de aquella temporada bajaron a la Segunda División con el Oviedo y el Sporting.

La última vez que los azulgrana visitaron el viejo Los Cármenes fue en 1976

"Te jugabas la pierna ante Montero Castillo o Fernández", recuerdan Asensi y Rexach

"En Los Cármenes, lo de jugar era muy relativo", afirma Asensi al recordar aquellas visitas que, dice, exigían "valor y coraje". "No es que fuera peligroso. Es que te jugabas la pierna contra futbolistas muy duros, como Fernández, un paraguayo que había estado en el Barça, y especialmente Montero Castillo, un uruguayo. Te intimidaban". Explica El Chepas que con frecuencia les llamaban la atención, pero que servía de poco. "Tú ya les podías decir misa que la hostia te la llevabas igual", bromea. Le da la razón Rexach. "Como panes, patadas como panes nos daban", rememora Charly, que no olvida el campo, "muy grande y muy seco": "El balón se levantaba dos metros en cada bote, una excusa perfecta para aquellos defensas que te ponían la bota en la boca porque, según decían, iban al balón". El Barça ganó nueve partidos de los 17 que jugó allí, empató cuatro y perdió otros cuatro, el último en 1972 con dos goles de Porta, pichichi de aquel año.

Pero los tiempos cambian y el Barça se encontrará hoy ante un equipo "atrevido, muy valiente y dinámico", según Pep Guardiola. Ahora, además, la televisión protege el talento, cuenta Rexach; "antes nunca salía la patada en el Estudio Estadio". "Ahora las cámaras lo ven todo", remacha Asensi.

Aseguran los azulgrana que el empate (0-0) contra el Sevilla no ha hecho mella en el ánimo del equipo, que viaja sin Puyol -"por precaución por unas molestias en el pubis; mañana le darán el alta", dijo el técnico-, sin los también lesionados Piqué, Alexis y Afellay y con los jugadores del filial Montoya y Cuenca. Con Guardiola de entrenador, el Barça solo dejó de marcar en 14 de los 197 partidos disputados, seis en el Camp Nou.

"Llevamos mucho esfuerzo en muy poco tiempo y tenemos que ver cómo respondemos, pero ojalá que en todos los empates y todas las derrotas que podamos recibir nos comportemos como contra el Sevilla", argumentó Guardiola, sorprendido incluso de que no haya más lesiones con la tralla que llevan sus futbolistas: "Acumulamos desgaste".

Ante tanta exigencia, es posible que Xavi descanse ante el Granada, un equipo que solo ha sumado dos puntos en los últimos encuentros y lleva tres sin marcar. Guardiola rota a la plantilla y defiende a todos sus futbolistas. Ayer fue el turno especialmente de Messi y Villa.

"Gracias a David podemos jugar tan bien al fútbol", explicó Guardiola sobre Villa; "tiene una gran humildad para correr al espacio una y otra vez, sin que a veces sus compañeros le den el balón. Otros jugadores no estarían dispuestos a desempeñar un papel que podría no convenirles por su forma de jugar. Siendo el máximo goleador de la selección española, juega para el equipo y no el equipo para él".

¿Y Messi? "Está bien, recuperándose del esfuerzo", respondió el técnico azulgrana. "No hay tiempo para que te acaricien las cosas buenas o te afecten las que han ido mal. Él sabe que es parte del juego", añadió en referencia al penalti que falló el sábado contra el Sevilla. La Pulga lleva dos partidos a cero después de marcar 16 de los 42 goles del Barça y dar 10 asistencias en las distintas competiciones, de manera que ha participado en el 62% de los tantos del equipo. En la Liga, curiosamente, solo ha metido goles, 10, en el Camp Nou: dos al Villarreal (5-0) y el Racing (3-0) y tres a Osasuna (8-0) y al Atlético (5-0). Únicamente dejó de marcar contra el Sevilla. Se fue sin estrenarse de Anoeta (2-2), Mestalla (2-2) y El Molinón (0-1). A favor de Messi está que Montero Castillo ya no juega en el Granada.