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Aguirre utiliza un supuesto "asalto" para atacar a Interior

Dos jóvenes entraron de madrugada en el patio del edificio en el que vive

Esperanza Aguirre, presidenta de Madrid, mantuvo ayer un rifirrafe con el Ministerio del Interior por el tratamiento que la policía dio a dos jóvenes que rompieron la puerta del edificio donde vive. Durante el acto de presentación de la lista del PP de Madrid, en el que Mariano Rajoy presentaba a su equipo, en el que está incluido Alberto Ruiz-Gallardón, la presidenta denunció que en la madrugada del miércoles dos individuos "asaltaron" su casa y la policía los dejó libres sin tomarles declaración. Aguirre cargó contra la delegada del Gobierno en Madrid, Dolores Carrión, y contra Interior.

Los hechos son los siguientes: Dos seguidores del Real Madrid, con algunas copas encima según fuentes policiales, dieron una patada en el patio del palacete en el que vive la presidenta sobre las cuatro de la madrugada y entraron en el patio del inmueble, en el que residen otros vecinos. Los agentes de la Guardia Civil encargados de la seguridad visionaron los hechos por el vídeo de vigilancia, llamaron a la policía y los hombres fueron conducidos a comisaría.

No sabían que vivía allí

Los agentes les preguntaron por los hechos, confirmaron que no llevaban armas ni instrumentos peligrosos, se levantó el correspondiente atestado por una falta de daños que se envió al juzgado y fueron puestos en libertad ante la falta de indicios de delito. Un agente de la Brigada de Información se personó también en comisaría. Los hombres aseguraron que no sabían que en el inmueble viviera Aguirre.

La presidenta, sin embargo, consideró un escándalo lo sucedido, cree que se ha producido un allanamiento de morada -delito que exige que se haya entrado en un domicilio- y denunció que los agentes no les tomaran declaración formalmente, algo que según Interior, la ley no prevé para las faltas. El equipo de Aguirre insiste en que los jóvenes estaban sobrios. "Si esto me pasa a mí, ¿qué será de la indefensión del resto de los ciudadanos?", dijo la presidenta.

El ministro del Interior, Antonio Camacho, la llamó poco después para explicarle en qué estado estaba el expediente y le pidió que no usara la labor de la policía "en la confrontación política" electoral. Fuentes cercanas a Aguirre aseguran que la presidenta había tratado sin éxito de hablar con Camacho. Desde el gabinete del ministro se afirma que no es cierto, que hablaron antes de las diez de la mañana y que Camacho le aseguró que pediría toda la información para transmitírsela, como hizo en cuanto la tuvo disponible.

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