'ITV' para los televisores Bravia

Ocho modelos de televisores Bravia, de Sony, deben pasar una inspección gratuita de seguridad porque un defecto de fábrica podría provocar el sobrecalentamiento del aparato. La medida podría afectar a 1,6 millones de clientes de la multinacional japonesa en todo el mundo, 630.000 en Europa, ya que estos televisores empezaron a comercializarse en 2007. Sony revisará y reparará gratuitamente y a domicilio los Bravia afectados, pero no los cambiará por un nuevo aparato. Los clientes que tengan uno de estos modelos (KDL-40D3400, KDL-40D3500, KDL-40D3550, KDL-40D3660, KDL-40V3000, KDL-40W3000, KDL-40X3000 y KDL-40X3500) deben contactar con el servicio de atención al cliente de la compañía.

En la página support.sony-europe.com, la empresa da más información (en inglés) sobre los modelos defectuosos y facilita instrucciones para identificar a través del mando a distancia del propio aparato si este es uno de ellos.

Un fallo "de calidad" en una de las piezas del interior de estos televisores podría ser el causante del calentamiento excesivo de las mismas e incluso hacer que se quemen, lo que podría provocar también que la parte superior del aparato se funda parcialmente, según el comunicado del fabricante japonés.

Según el Ministerio de Industria nipón, hasta el momento en Japón se han detectado 11 casos de sobrecalentamiento, aunque ninguno de ellos ha provocado daños mayores. En el país asiático estos modelos ya no están a la venta, según Sony, que no facilitó ayer información sobre el resto del mundo. Sony España no tenía evaluado el impacto de la medida en el mercado español.

Ayer, además, la compañía comunicó un nuevo ataque cibernético en sus plataformas de juego en Internet, como Playstation Network, que le obligó a bloquear temporalmente 93.000 cuentas. El fabricante descartó que los intrusos hubiesen accedido a los datos financieros de sus clientes.

La empresa reconocía un "importante" nuevo ataque a sus plataformas en Internet. "Hemos detectado una gran cantidad de accesos no autorizados en los servicios Playstation Network (PSN), Sony Entertainment Network (SEN) y Sony Online Entertainment (SOE)", aseguraba en un comunicado.

Únicamente, siempre según la compañía, una pequeña cantidad de las cuentas afectadas se vieron comprometidas por movimientos sospechosos. En cualquier caso, la compañía pedirá a los titulares de todas estas cuentas que cambien sus claves de acceso.

2011 será recordado por Sony como su año horrible. El pasado abril ya tuvo que cerrar las mismas plataformas porque los datos de 100 millones de clientes se vieron expuestos. A diferencia de ayer, entonces la compañía tardó más de una semana en reconocer el ataque. Luego sufrió otros menores.