Los militantes aseguran haber oído propuestas

Los militantes y delegados del PP vieron ayer a un Rajoy distinto al que percibieron los demás. El graderío, el calor, la simpatía ideológica o las copas de la noche del viernes en la discoteca donde se reunieron muchos asistentes a la convención del PP en Málaga les hicieron escuchar un discurso con propuestas y desoír los llamamientos a la unidad de todos, sin ideologías. Mientras su líder llamaba a la concordia, el público gritaba a coro: "A por ellos".

María Antonia Vidal, una voluntaria de un centro de atención a drogodependientes invitada a la convención, resumió la entrega de los asistentes al responder que iba al palacio de congresos "a por el cambio". Se refería al lema del PP.

Durante la convención, el equipo de redes sociales de Rajoy atendió miles de tuits y mensajes. La consigna de Rajoy fue responder a todos los posibles. "Que todos se sientan leídos. Esto es importante, no es una estrategia de márketing", aseguró una integrante del equipo que les dijo el líder.

Ana Marín, diputada autonómica por Teruel, afirmó tras la intervención de Rajoy que el discurso fue "bueno" y "realista", porque "afronta la situación como es y aporta soluciones y respuestas a los problemas". Mientras todos los periodistas rebuscaban en los papeles una propuesta para encabezar las crónicas, ella aseguró que Rajoy hizo un discurso programático.

Igual de entregado se mostró Miguel Ruiz, un invitado de Alhaurín (Málaga), que escuchó "el discurso del futuro presidente para todos los españoles". Destacó la importancia dada al empleo y a la educación, y una compañera le apuntó: "Y que no va a mentir. Eso es importante". Ruiz escuchó más que nadie, porque afirma que se habló de bajar impuestos, facilitar el crédito y ayudar a los autónomos.