_
_
_
_
Reportaje:

"Si la Xunta no paga, será la de dios"

El retraso de las ayudas para libros de texto asfixia a los libreros - Se verán abocados a solicitar créditos si Educación no acelera las transferencias

La librería Escolma es una de las más conocidas de Pontevedra. Situada en pleno centro, la venta de libros de texto supone el 70% de sus ventas, de modo que el retraso de la Consellería de Educación en abonar las facturas de agosto y septiembre ha disparado las alarmas. Alfonso Rodríguez, uno de los socios de la empresa, se sienta en el despacho que tiene en la tienda y extiende el dedo hacia el montón de facturas por pagar que se acumulan en un extremo. Asegura que la situación que se encontró la semana pasada, cuando se acercó a la delegación de la Xunta a preguntar por la demora, fue similar, con un funcionario rodeado de sobres que ponía cara de circunstancias. "Si no pagan va a ser la de dios", augura.

Los libros escolares suponen hasta el 70% de las ventas en muchas tiendas
"Nos deben 65.000 euros, y nos dicen que no nos pagarán antes del día 10"

"Me dijeron que ya han pagado dos millones de euros, pero yo no he cobrado nada de julio ni agosto", cuenta Rodríguez, que tiene 50.000 euros pendientes de abono. Desde finales del pasado curso, los padres empezaron a entregar vales para canjearlos por los libros, pero fue a partir de agosto cuando los pedidos arreciaron. La Federación de Libreros de Galicia denuncia que la deuda acumulada supera los 10 millones.

En un negocio como el de las librerías, sin grandes márgenes de beneficio y con un progresivo descenso de ventas, la campaña de los libros de texto solía ser un respiro anual, con unas ventas mínimas garantizadas casi todas. El nuevo sistema de ayudas de la Xunta, que sustituyó la gratuidad que instauró el bipartito por subvenciones para las familias con menos ingresos, supuso al menos una ventaja para los libreros a la hora de cobrar, con un sistema de canje que en 2010 no dio problemas. "Funcionó realmente bien. A lo mejor había un retraso de 30 días, pero es algo normal", recuerda Rodríguez, que llegó a descuidar los primeros pedidos de verano para concentrar las facturas en agosto. Ahora se lamenta. "Si no pagan antes de fin de mes vamos a estar muy fastidiados", indica. "Si la editorial no cobra a tiempo deja de mandar las novedades, y no nos podemos permitir perder a los proveedores". En Escolma no descartan pedir un préstamo para ir tirando, pero temen el cerrojazo al crédito: "Los bancos ya se ve cómo están, que no prestan nada".

En la veterana librería El Pueblo también se ven con la soga al cuello. "Tenemos 65.000 euros pendientes de cobro", señala con gesto grave Francisco Soage, uno de sus socios. La deuda acumulada corresponde solo a agosto y septiembre. "Algunos traían los vales ya en junio y julio, pero no nos parecía bien cogerlos cuando aún no teníamos los libros", dice. "En la Xunta nos han dicho que antes del día 10 no nos pagan", asegura, en contraste con la postura oficial de Educación, cuyos portavoces insisten en que la situación "se está gestionando para pagar de forma inmediata".

"Vamos a tener que abrir una línea de crédito, porque no queremos fastidiar las relaciones con la editorial. Si los 65.000 euros fuesen beneficio podría aguantar más, pero no es el caso". Soage entiende que si fuesen las familias las que recibiesen directamente las ayudas, ahora no tendrían problemas de pago. Rodríguez, sin embargo, cree que por lo que a los trámites se refiere, el sistema es bueno. Siempre que se cobre. "Antes había que ir al banco a llevar los recibos y muchos venían de vuelta", argumenta.

Otras librerías, menos centradas en la venta escolar, se ven consecuentemente menos afectadas. Así sucede en la emblemática librería Michelena, que tuvo que cerrar a mitad de 2010 y empezó de cero en otra ubicación. Tanto allí como en otros dos establecimientos del ramo sus responsables aún no han llevado las facturas a la Xunta. "Lo veo muy jorobado", termina Rodríguez, que vaticina: "Si tenemos que manifestarnos, lo haremos".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_