Una reforma en su casa y el catastro disparan el patrimonio de Fabra

El patrimonio del presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, ha registrado, entre enero y octubre, un incremento espectacular. Según los datos publicados en el Boletín Oficial de la Provincia de Castellón, en enero, cuando aún ocupaba el puesto de alcalde de la capital de La Plana, Fabra poseía bienes inmuebles por un valor de 130.241 euros, mientras en que la realizada tras su cese en julio, publicada a finales de septiembre, estos sumaban más de 717.000, tal como publicó el mismo boletín el pasado sábado.

La explicación, según indicaron ayer fuentes de Presidencia de la Generalitat, está en que, por una parte, la primera declaración hacía referencia a sus bienes de forma individual, mientras que la segunda ha publicado el total de los gananciales, de los que a Fabra le corresponde el 50%, con lo que su patrimonio quedaría en algo más de 350.000 euros. Aún así, las cifras reflejarían un patrimonio triplicado. Sin embargo, las mismas fuentes dieron otra explicación a este aumento e indicaron que la vivienda a la que hace referencia ha sido objeto de una importante reforma que ha revalorizado el inmueble sobre el que, además, se ha producido una revisión catastral, al igual que ha ocurrido con todos los edificios de Castellón. Así, la casa, que tenía un valor catastral de 80.000 euros, ha pasado a tenerlo de 524.000, es decir, ha multiplicado su valor por 6,5.

La última declaración refleja bienes por más de 717.000 euros

El valor de esta vivienda está recogido en otra declaración de bienes presentada por Alberto Fabra, la que el ahora presidente de la Generalitat presentó en junio en las Cortes Valencianas, tras ser elegido diputado autonómico. En este documento especifica que, además de esta casa, posee el 50% de un apartamento en Benicàssim y otro en Puertomingalvo (Teruel), lo que completaría los poco más de 130.000 euros en patrimonio declarados en enero.

Sin embargo, a la hora de presentar la declaración en el momento del cese como alcalde, hace unos días, la revisión catastral se había efectuado ya, de ahí que Alberto Fabra aportara la cantidad revisada y en global, los más de 717.000 euros, sin precisar que se trataba del 50% de la cantidad que recoge el boletín.

En el caso del pasivo, las explicaciones otorgadas por las mismas fuentes son similares. En enero, declaró un pasivo de 157.500 euros, el mismo que en septiembre, mientras que en la declaración presentada en junio ante las Cortes dijo tener un crédito hipotecario de 309.000 euros, del que le es atribuible un 50%, es decir, 154.500 euros, poco menos de lo que ahora ha aparecido publicado. La justificación de la revalorización de la vivienda sin aumentar sus deudas es que el crédito que ya figuraba en enero es el que se solicitó para la reforma, una obra que ahora ha supuesto que la vivienda aumente, considerablemente, de valor.

Los inmuebles de Castellón no habían sido sometidos a una revisión catastral desde 1995. En los casos consultados, el nuevo valor ha supuesto triplicar el valor de las propiedades respecto al de hace 15 años.