PP y PSOE aprueban una calle a Fraga

El pleno municipal de Santiago, con apoyo de PP y PSOE y la oposición del BNG, decidió ayer que una calle, sin precisar cuál, llevará el nombre del expresidente de la Xunta, Manuel Fraga . El alcalde, Gerardo Conde Roa, alabó la gestión de Fraga en el Gobierno gallego y su colaboración con la ciudad. "Dejó una impronta imborrable, y es un acto de cariño recordarlo con una calle", sentenció.

Rubén Cela, del BNG, manifestó su "disconformidad" con la decisión, que asegura "no cuenta con la misma mayoría en la calle". El nacionalista criticó que en la biografía anexa a la orden del día olvidaba mencionar que fue ministro "de una dictadura de la que nunca renegó". Cela también evocó la Ley de Memoria Histórica y pidió irónicamente que en la placa figure alguna de las frases altisonantes del político ahora retirado.

El grupo socialista, a través del exalcalde Xosé Sánchez Bugallo, aseveró que "con la Constitución se pasó página". Tras tildar de "excelente" la labor desarrollada por el "amigo de Santiago", Bugallo mencionó la posición de Fraga a favor de la capitalidad y su papel impulsor " en el Xacobeo o el Consorcio de Santiago".

En el turno de réplica, Paula Prado, del PP, reprochó que el socialista no hiciese lo que ahora defiende durante su mandato, aunque agradeció que finalizara "el secuestro" de la figura de Fraga por culpa de las actitudes "sectáreas y mezquinas" del BNG durante el bipartito municipal. El socialista contestó que en su etapa Fraga y Felipe González fueron gratificados con la medalla de la ciudad y con el título de hijos adoptivos. Para concluír, Conde Roa reconoció el apoyo de Bugallo y advirtió que "también reconocerá a políticos de otra ideología".

Durante el debate, una docena de jóvenes portó carteles en contra de la decisión. Unos veinte no pudieron acceder. Ahora, "la calle es suya", parafraseó el nacionalista Cela.