"Nosotros no elegimos rival"

Se jugaba el último cuarto del partido y Francia perdía por casi 30 puntos. Pero a sus dos estrellas no parecía importarles mucho la paliza que estaban recibiendo por parte de España. Tony Parker se reía sin disimulo en el banquillo y Joakim Noah incluso bostezaba mientras sus compañeros aguantaban el chaparrón como podían. Hasta el público lituano comenzó a silbar cuando en los últimos nueve segundos el base Albicy se dedicó a botar el balón pasivamente a la espera de que acabara la pantomima. El griterío reprobador hizo a Albicy levantarse para anotar un triple y poner en el marcador el 69-96 final, la primera derrota francesa en el Europeo, de manera que solo Rusia sigue invicta.

"Sabemos quiénes somos si jugamos con espíritu de sacrificio", resalta el técnico

Collet recuerda: "Ya vimos lo que pasó en 2009. Los españoles nos eliminaron

¿Se dejó ganar Francia? La pregunta voló desde el seleccionador francés hasta los jugadores españoles después del partido. Fue tan evidente que su conjunto bajó los brazos que hasta la federación francesa lo admitió sin tapujos. Francia deja hacer a España, tituló la crónica del partido en su página web y en ella habló de dos equipos que jugaron "con el freno de mano, especialmente les bleus".

La acusación llegó pronto a los oídos del técnico, Vincent Collet, que se revolvió en su asiento de la sala de prensa: "Gelabale todavía estaba lesionado. Noah tenía molestias en la pierna izquierda. Yo quería hacerle jugar unos minutos, pero el doctor me dijo que no, que era peligroso. El caso de Parker es diferente. Se sentía cansado después de los últimos partidos y decidimos reservarle. Ha jugado mucho en el inicio del torneo y era nuestra oportunidad para hacerle descansar y refrescarle". Sí, Parker ha jugado 233 minutos, más que ningún jugador español incluido el partido de ayer (226 suma Marc Gasol y 203 Navarro).

Tanto como el fondo, a Francia y a Collet se les reprocharon las formas. "Pero ser los primeros del grupo no importaba tanto. Nuestro objetivo era preparar bien los cuartos de final", dijo el seleccionador, "y ya vimos lo que pasó en el Europeo de 2009. Entonces nosotros quedamos los primeros en la segunda fase y España fue la cuarta de su grupo. Nos enfrentamos en los cuartos y nos eliminaron". La jugada actual, sin embargo, les evita un hipotético cruce con Lituania, la anfitriona, en las semifinales, precisamente el partido que dará acceso no solo a la final, sino también a la clasificación directa para los Juegos Olímpicos de Londres 2012 (se clasificarán directamente los dos finalistas mientras que los situados del tercer al sexto puesto deberán disputar un torneo preolímpico).

El presidente de la federación española, José Luis Sáez, dio su versión: "No soy nadie para enjuiciar actitudes. Francia... Nosotros hemos hecho lo que procede: jugar a ganar. Representamos a un país". "Cada equipo tiene su situación. Cada uno habla de lo suyo. Yo entiendo perfectamente la posición de Francia", explicó diplomáticamente Sergio Scariolo, el técnico del cuadro español. "Francia ha honrado el campeonato siendo el mejor equipo hasta hoy y hoy ha reservado algunos jugadores. Puede que no sea lo mejor para el público, pero en la primera parte nos ha jugado en igualdad. Todo tiene su lógica. Nosotros hemos luchado para tener un día de descanso entre partido y partido [España jugará los cuartos el miércoles y, de ganar, las semifinales el viernes y la final el domingo] y no para elegir rival", dijo. "Estamos muy contentos de cómo llegamos a los cuartos, sin sobrecarga de minutos y con las ideas claras acerca de lo que somos cuando jugamos con espíritu de sacrificio e intensidad defensiva y de lo que somos cuando no lo hacemos así", añadió.

"Yo me preocupo de mi equipo", redundó Rudy Fernández, autor de 15 puntos en una de sus mejores versiones; "estamos todos sanos y concentrados. Lo que hagan los otros no me importa. Ellos sabrán lo que es mejor para ellos. Nosotros sabemos lo que es mejor para nosotros: ser los primeros del grupo". El capitán, Navarro, le secundó: "No miramos a Francia ni a nadie. Claro que con Parker y con Noah habría sido diferente. Esperamos volver a encontrarnos con ellos. Ha sido un partido extraño. No esperábamos que no jugaran. Pero, repito, me quedo con nuestro cambio de actitud. Si somos agresivos como en la segunda parte y nos defendemos así, hay pocos equipos que nos puedan parar".

La rendición francesa permitió que Scariolo jugara los últimos minutos con el quinteto reserva: Sada, Llull, Claver, Reyes e Ibaka. Por primera vez, los suplentes tuvieron una gran aportación ofensiva: 45 de los 96 puntos, casi la mitad.

España viaja hoy a Kaunas. El miércoles le espera Eslovenia o Finlandia en los cuartos, según los resultados de hoy (ayer quedaron apeadas la subcampeona del mundo, Turquía, y la Alemania de Nowitzki). Francia jugará contra Grecia el jueves. Los españoles y los franceses solo podrían volver a verse las caras en la final, el próximo domingo.