Susto por un derribo en Elche

Las obras de derribo de una casa contigua a un edificio ubicado en la calle José Bernat de Elche pusieron ayer al descubierto la fragilidad de algunas construcciones de la ciudad. Un bloque de ocho viviendas tuvo que ser desalojado debido a que la máquina que estaba trabajando en la demolición provocó un boquete en la pared medianera entre la casa y el edificio, abriendo un hueco con el bajo del edificio contiguo en el que estaba trabajando en ese momento un zapatero.

El problema es que esta medianera es el antiguo muro de carga construido con piedra que sustentaba la vivienda donde se levantó el nuevo bloque de pisos, una pared que fue mantenida para levantar sobre ella la medianera del resto de la construcción. Por eso el incidente, ocurrido poco antes de la una del mediodía, dejó abierta la posibilidad de que todo el bloque sufriera problemas estructurales, lo que obligó a tomar la determinación de evacuarlo.

Hasta el lugar se desplazaron dos jefaturas y dos vehículos pesados del parque de bomberos de Elche, así como de la edil del Ayuntamiento de Elche, Cristina Martínez, que procedió a inspeccionar este edificio de cuatro plantas para determinar si los vecinos de las ocho viviendas podían volver a sus hogares con garantías de seguridad. Finalmente, la inspección de un técnico municipal y del arquitecto director del derribo coincidieron en que los vecinos de las viviendas afectadas podían volver a sus domicilios tras quedar restañado el muro de carga.