Grajales negocia la entrada de un grupo industrial chino en Alestis
La aeronáutica ha vendido a Zhenshi Holding Group una planta por 29 millones
Alestis, la segunda empresa aeronautica española, de origen e ingeniería vasca, no quiere quedarse atrás en la carrera por ganar dimensión que ya inició Aernnova al sellar una alianza con el fondo soberano de Abu Dabi (Mubadala). La aeronaútica vinculada a Euskadi a través de la ingeniería SK10, que dio origen al grupo andaluz, y cuyo consejero delegado es el empresario Gaizka Grajales, está negociando la venta de una participación al grupo industrial chino Zhenshi Holding Group.
Necesitada de liquidez para desarrollar la ingeniería previa a la inminente construcción de las piezas de los dos contratos que tiene con Airbus, Alestis entiende que la participación del grupo chino, "muy grande y muy diversificado", según fuentes conocedoras de aquel mercado, proporcionará la inyección económica sin la cual Alestis puede tener problemas en esta época de estrechez financiera. Zhenshi tiene intereses en la producción de fibra de vidrio, minería, aceros especiales y hoteles.
Zhenshi tiene unos activos totales cifrados en unos mil millones de euros
La firma asiática podría solucionar los problemas de liquidez de Alestis
De hecho, Alestis Aerospace presentó en abril un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afecta a 195 trabajadores de su planta de El Puerto de Santa María (Cádiz) de los 348 que la compañía incorporó procedentes de la antigua fábrica de Delphi en Puerto Real, que cerró sus puertas en 2007. Este acuerdo dio entrada a la Junta de Andalucía en el accionariado de la aeronaútica y a la aprobación de un ambicioso programa de recolocación que todavía no ha concluido.
El Consejo de Administración de Alestis dio luz verde al inicio de las conversaciones con el grupo chino el pasado mayo, marcándose como objetivo la venta de una participación, que se uniría al acuerdo ya cerrado para vender a Zhenshi una planta de fabricación de componentes de fibra de carbono por casi 29 millones de euros.
Los tres Tier-1 -suministradores prioritarios de Airbus- tienen que subcontratar parte de su producción a China, a cambio del compromiso del gigante asiático de encargar aviones A-350. Es decir, la propia Airbus exige a los suministradores europeos por contrato que subcontraten a China parte de las piezas como contrapartida a garantizar la viabilidad del modelo de aeronave. Pero eso es una cosa, y entrar en el accionariado otra.
De hecho, la negociación sobre la forma de explotación de esa planta de nuevo cuño es la que ha dado lugar a las actuales conversaciones. El grupo chino pidió a Alestis la constitución de una joint venture para explotar la nueva planta, o bien proporcionara soporte técnico y el nombre de Alestis, como una manera de garantizar el éxito de la aventura.
Pero junto a esos planteamientos, el grupo chino ofrecía una segunda opción. "Si Alestis no pudiera participar como socio en la joint venture, entendiendo las dificultades que sufre el sistema financiero español en este momento, Zhenshi podría considerar su participación en Alestis", trasladó al empresa china al consejo de administración.
Alestis prefiere esta segunda opción. Las conversaciones se están desarrollando en Madrid, en la sede de la firma oriental con un interlocutor de confianza de Mr. Zhang, el presidente y propietario de Zhenshi Holding Group.
Zhenshi, con un rápido crecimiento, tiene unos activos que se acercan a los mil millones de euros, después de las inversiones que ha hecho recientemente en el sector financiero y tiene una participación considerable en Jushi Group, la firma líder mundial de fabricación de fibra de vidrio.
Tanto Aernnova, como Alestis y Aciturri tienen la consideración por parte de Airbus de Tier-1, es decir, suministradores de primer nivel, aunque todavía ninguna de ellas se acerca al deseo de Airbus de disponen en cada país de un gran Tier1, una empresa de referencia con unas ventas de unos mil millones de euros.
La participación de grupos extranjeros en las aeronaúticas españolas, no solo tienen como objetivo afrontar los retos de ingeniería para los contratos con Airbus, sino continuar en la carrera para convertirse en el gran Tier-1 que canalizara contratos más cuantiosos para los futuros modelos del constructor europeo.
Más necesidad cuando menos dinero fluye
El camino que inició Aernnova, con la venta de una participación accionarial, aún en negociación, al fondo soberano de Abu Dabi (Mubadala), lo sigue ahora Alestis Aerospace. Se trata de lograr financiación cuando menos dinero fluye de las instituciones financieras.
Las tres empresas colaboran en los proyectos de Airbus, tanto en el campo civil como en el militar, con el avión cuatrimotor A-400M y es precisamente este año cuando tienen que afrontar costosas inversiones para empezar a fabricar las primeras piezas que entregarán a Airbus para que ensamble los primeros aviones que comenzarán la fase de certificación.
Aernnova, capitaneada por Juan Ignacio López Gandasegui, es la que más facturación tiene de las tres y la que más prisa se ha dado para resolver ese problema.
Se encargará del estabilizador horizontal y del elevador del A350, un contrato de 3.000 millones de euros por 30 años. La firma vasca, cuyo socio financiero siendo Caja Castilla-La Mancha, con las incertidumbres que eso generaba, se escindió de Gamesa para especializarse y le va bien. Ha sorteado la crisis con una alianza con el citado fondo de Abu Dabi, que le va a suponer una importante inyección de fondos. Gandasegui respaldó la apuesta con sus bienes personales. Ha conseguido una firma con más de 3.500 empleados y una facturación en el difícil 2009 de 378 millones de euros, aunque la estimación superaba los 450 millones.
La sociedad Alestis Aerospace, controlada por la Junta de Andalucía, tiene su sede social en Sevilla. Constituida en 2009 y con una plantilla de 1.700 personas, esperaba facturar unos 100 millones de euros en 2010. Su consejero delegado es Gaizka Grajales. Solo para la fabricación de las piezas del A350 necesita invertir más de 160 millones entre 2010 y 2013.
Aciturri Aeronaútica, es la más pequeña de las tres firmas, pero la que mayor solidez financiera presenta. El grupo castellano-leonés que preside Ginés Clemente tiene contratos por 1.600 millones de euros. Con la compra de Aries, Aresa, Acta Tecnología y Aerosur, ha ganado entidad. Sus facturaciones se sitúan en torno a los 100 millones de euros
Contratos
- Primer contrato. Por 1.000 millones. La pieza del A-350 XWB que se construirá, el belly fairing -la panza-, es una estructura de fibra de carbono de unos 170 metros cuadrados. El contrato se extiende 20 años.
- Segundo contrato La pieza es el cono de cola del mismo modelo de Airbus, realizada también en fibra de carbono. El contrato, por 700 millones, también supone 20 años. El A-350 estará disponible desde 2013.
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