Las limpiadoras de colegios revientan otro pleno de Vigo
Las protestas de las limpiadoras de los colegios públicos de Vigo provocaron ayer de nuevo la suspensión del pleno municipal, la cuarta vez que esto ocurre desde noviembre. Quieren que la coporación oiga sus razones y presione sobre la concesionaria del servicio, Linorsa, para que cumpla los acuerdos que motivaron la suspensión de una huelga que las trabajadoras mantuvieron durante 23 días.
Las limpiadoras acusan a Linorsa de incumplir los acuerdos relativos a cambios de horarios, ampliación de jornada para tres de ellas -necesitan esas horas para completar sus derechos de jubilación- y la readmisión de una despedida por participar en la huelga. Y al Ayuntamiento, de desentenderse del problema después de invocar la necesidad de acuerdo y ejercer de árbitro. Sus portavoces han pedido reiteradamente exponer sus motivos ante el pleno municipal, pero se les ha negado por cuanto, según los portavoces de los tres grupos municipales, no existe constancia de tal petición, aunque las trabajadoras aseguran haberla planteado "en tiempo y forma" el pasado día 13.
Tras la suspensión de la sesión -se retomará el jueves-, un grupo de limpiadoras trató de acceder a la alcaldía, donde chocaron con varias trabajadoras municipales que les cerraron el paso. El portavoz socialista, Carlos López Font, convocó a los medios para denunciar "una escalada de violencia que hay que detener". Tachó los hechos de "atentado" contra las funcionarias, que concretó en "agresiones, forcejeos y empujones". "Lo único que hubo fueron pequeños empujones por las dos bandas", precisa Tránsito Fernández, portavoz de las limpiadoras.
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