"Pizarro mostró su afecto a Chaves", dice la ejecutiva
La ejecutiva regional del PSOE no va a entrar en el diván psicológico para interpretar si lo dicho por el exconsejero de Gobernación y Justicia Luis Pizarro sobre Manuel Chaves -"para mí, Chaves es el presidente de la Junta", dijo el sábado en un mitin en Conil (Cádiz)- era una declaración política de intenciones. La presidenta y portavoz de la dirección, Rosa Torres, las enmarcó ayer en una demostración de "afecto" de dos personas que han estado media vida política trabajando juntas "en unos momentos complicados" para el vicepresidente tercero del Gobierno.
Esa misma lectura también la han hecho personas próximas a Luis Pizarro, quien hace una semana presentó su dimisión por entender que el cese del delegado del Gobierno andaluz en Cádiz era un intento de desestabilizar a la ejecutiva provincial que dirige Francisco González Cabaña.
Torres transmitió ayer en rueda de prensa palabras de apoyo al que fuera presidente andaluz durante 19 años y actual presidente federal del PSOE por las críticas sobre la actividad profesional de su hijo mayor. La presidenta del partido acusó al PP de poner en marcha una "persecución con métodos inquisitoriales" contra Manuel Chaves.
A no ser que salte otra piedra en el camino mayor que la dimisión de Pizarro, en el PSOE andaluz se ha abierto un compás de espera interno hasta después de las elecciones municipales del 22 de mayo. Este paréntesis pasa por negar la mayor -"no hay crisis en el PSOE", en palabras de Rosa Torres-, reforzar al secretario general y presidente andaluz, José Antonio Griñán, y cerrar filas con vistas a la próxima cita electoral. Los resultados marcarán el futuro.
