El Reina Sofía suena a Cadaqués
La Orquesta de Cadaqués nació en 1988 entre contrastes. Sus músicos se reparten por toda Europa, y solo se reúnen para tocar cuando tienen un concierto o acuden a un festival. Tiene tres directores -el último, el flautista santanderino Jaime Martín- y planifica estratégicamente su repertorio con dos objetivos: recuperar la música antigua y apostar por los compositores más vanguardistas.
Estos contrastes llegarán a través de una selección de sus intérpretes hasta el Reina Sofía. El Ensemble de la Orquesta de Cadaqués dará un concierto gratuito en el auditorio del museo mañana, a las 19.30, con un programa acorde con lo que el Reina Sofía simboliza: eclecticismo y modernidad. A las órdenes de Domingo Hindoyan, abrirán el programa con el Concertino para piano y seis instrumentos de Janácek. El compositor checo configura en esta pieza su entramada concepción de la música entre la tradición alemana y el folclore eslavo.
Para el resto del concierto han elegido obras de autores patrios. Un estreno absoluto de Víctor Rebullida, encargo de la orquesta -Once upon a time-, y sendas piezas de dos premios nacionales de música: la Bitácora, llena de matices, de Jesús Rueda, y GIC 97, la obra con la que el catalán Joan Guinjoan celebra la alegría de crear.
