El PSdeG denuncia que se infló el coste de un barco subvencionado

La Cofradía de Pescadores de Cambados recurrió a ayudas de la Xunta para financiar el pago de un barco bateeiro en el que se gastó 340.000 euros. El astillero elegido, Polináutica, SL, invirtió mucho menos en construirlo: 185.000 euros, una cantidad muy cercana al total de la subvención de la Xunta, 176.000. El aparente desfase en los costes fue abordado ayer en la Comisión de Pesca del Parlamento. La portavoz socialista, Marisol Soneira, pidió al director general de Competitivade e Innovación Tecnolóxica, Juan Maneiro, que investigue el asunto. "Me gustaría ver que la Consellería do Mar no tiene nada que ver", afirmó la diputada.

Una orden de la consellería de febrero de 2009 establece las bases reguladoras para "la concesión, en régimen de concurrencia competitiva, de las ayudas a las inversiones en transformación y comercialización de productos procedentes de la pesca, del marisqueo y de la acuicultura, cofinanciadas con Fondo Europeo de Pesca". A finales de marzo, el patrón mayor de Cambados, Benito González, rellenó la solicitud para la ayuda. En ella, consignó que la oferta de Polináutica, propiedad de José Luis Núñez Miser y Fernando Otero Pérez, era la más barata de entre las tres presentadas, y adjuntó ya el coste final de la construcción del barco: 293.000 euros, que sumados al IVA dan lugar a los 340.000 finales. También argumentó entonces que el astillero tenía permiso para construir la nave, autorización que la consellería no firmó, por el contrario, hasta mayo.

Coste inferior

El presupuesto de la empresa fijaba un coste muy inferior. Eran 181.000 euros, de los cuales la partida más elevada era la destinada a un motor de 400 caballos, fijada en el presupuesto firmado por el ingeniero naval en 81.000 euros. Soneira insistió en que la factura del barco era muy superior a la de otro de características similares, que costó en torno a 90.000. "No digo que no pueda haber diferencias, pero esto son tres veces más. Es llamativo", adujo. Soneira insinuó que el patrón mayor pudo recibir trato de favor desde la Xunta. "A las amistades peligrosas no se les mira mucho los papeles", deslizó.

Maneiro defendió la tramitación de la subvención. "Miraremos lo que nos dice", accedió, pero señaló que la concesión de la licencia se tramitó "por el mismo procedimiento y los mismos funcionarios", que las ayudas otorgadas para otras 15 embarcaciones.