Hereu alerta de que la derecha puede frenar la ciudad

Pasada la página de las primarias, Jordi Hereu, alcalde de Barcelona, se dio ayer un baño de autoestima ante sus fieles de la federación socialista de Barcelona que le proclamaron candidato para las elecciones municipales del 22 de mayo en un acto en la sede del partido en la calle Nicaragua. El consejo nacional del PSC hará lo propio la próxima semana. Hereu, que fue recibido por sus incondicionales con una ovación, instó a los electores a movilizarse para que la ciudad no caiga en manos de la derecha y en la "parálisis".

Barcelona es la única ciudad que ha sido gobernada de forma ininterrumpida por la izquierda y los socialistas quieren basar parte de su campaña en el riesgo de un eventual tándem entre CiU y PP que, a su juicio, comportaría el recorte de políticas sociales. "Harían pagar a Barcelona el ajuste de la crisis", afirmó Hereu que considera agotado ya el "debate" entre los socialistas e iniciado el "combate político".

Bajo el elocuente lema Unidos ganaremos Barcelona, Hereu consideró aliados a los votantes que apoyaron a la ex consejera Montserrat Tura, a la que derrotó de forma severa hace ocho días. La dirección del PSC, que intentó hasta el último momento que Hereu renunciara a la reelección, no participó en el acto. El alcalde ha salido fortalecido en su pulso con el primer secretario y ex presidente de la Generalitat José Montilla, quien el jueves le felicitó pero alertó que en mayo no votarán los militantes y simpatizantes sino los electores.

Las encuestas arrojan como vencedor a Xavier Trias aunque Hereu ha recortado puntos tras las primarias. "Este ha sido un proceso enriquecedor. A Barcelona no le conviene un alcalde títere (de la Generalitat)", exclamó. Trias, que participó en una sesión para confeccionar su programa electoral, acusó a Hereu de haber "perdido los papeles". Y añadió que quienes han parado Barcelona han sido los socialistas a los que achacó el déficit social de la ciudad: "El gobierno municipal se ha vuelto conservador; se han apoltronado en sus asientos".