El Villarreal se deja empatar
Una jugada aislada brinda al Málaga un punto inmerecido
Recuperada su esencia, al Villarreal le faltó ayer acierto y fortuna. Y le sobró el fallo del árbitro, que no vio nada en el área del Málaga. El conjunto andaluz arrancó un empate en El Madrigal sin apenas ambición y dejó constancia de que su clasificación va acorde con su escasa propuesta. La falta de puntería dejó al Villarreal sin una victoria que tenía asumida de antemano en un partido meritorio en el que el conjunto de Garrido volvió a parecerse a sí mismo.
Garrido apostó por la terna de delanteros que posee, con Nilmar y Rossi en las bandas y Marco Ruben por el centro. Pensando en el Nápoles, descansó Cazorla. Se estrenó Willy Caballero en el Málaga, el quinto portero utilizado por el cuadro andaluz esta temporada. Un registro que antes solo habían tenido cuatro equipos en la historia de la Liga: Deportivo (1955-1956), Osasuna (1959-1960), Zaragoza (1965-1966) y Mallorca (1991-1992).
VILLARREAL 1 - MÁLAGA 1
Villarreal: Diego López; Mario, Gonzalo, Marchena, Capdevila; Borja Valero, Bruno, Cani; Nilmar, Marco Ruben (Cazorla, m. 69) y Rossi. No utilizados: Mariño; Musacchio, Catalá, Cicinho, Marcos Gullón y Wakaso.
Málaga: Caballero; Manolo Gaspar, Demichelis, Weligton, Eliseu; Apoño (Sandro Silva, m. 80), Camacho (Juanmi, m. 54), Portillo, Recio (Maresca, m. 71); Seba y Rondón. No utilizados: Arnau; Manu Torres, Fernando y Mtiliga.
Goles: 1-0. M. 36. Marco Ruben, a pase de Rossi. 1-1. M. 82. Seba, a envío de Rondón.
Árbitro: Teixeira Vitienes. Amonestó a Bruno y Maresca.
Unos 20.000 espectadores en El Madrigal. Se guardó un minuto de silencio en memoria de Alejandro López Ufarte.
El conjunto andaluz alineó a su quinto portero de la temporada, Caballero
Pellegrini, recibido con aplausos en El Madrigal, intentó aplicar a su exequipo la misma medicina: la paciencia infinita. A los amarillos les costó más que de costumbre trazarse los caminos hacia el gol a pesar de la constante presencia en la defensa y el ataque de Mario Gaspar.
El Málaga se conformaba con que nada sucediera, procurando no molestar ni ser molestado. Ante la escasa codicia del rival, creció el Villarreal en su juego aumentando su presencia en las cercanías del área rival con más constancia y precisión.
Evidenció el conjunto de Pellegrini que resulta vulnerable en la defensa, siendo el más goleado de la Liga con diferencia. No atendió la zaga blanquiazul un desmarque al espacio de Rossi, que recibió sin problemas el pase de Cani. El internacional italiano salvó con sutileza la salida de Caballero y Marco Ruben, cogido por Weligton, empujó el esférico a gol a apenas un metro de la raya.
Un penalti de Eliseu a Nilmar, no señalado, precedió una contra que Seba Fernández embocó a gol tras un centro raso de Rondón. El Villarreal había dominado, pero se quedó sin premio.
