Son la nueva generación de líderes

La segunda edición de Consejero delegado por un día toca a su fin. Los 15 finalistas seleccionados exhaustivamente entre cerca de 4.000 universitarios por las consultoras Odgers Berndtson y Ray Human Capital ya han pasado una jornada al mando de la empresa elegida gracias a esta iniciativa de EL PAÍS. Hoy presentamos a los tres últimos estudiantes que han ganado el concurso y han podido departir con los máximos responsables en España de Microsoft, Sony y AstraZeneca, María Garaña, Pedro Navarrete y Paul Hudson, respectivamente.

"Son la nueva generación de líderes", afirma Hudson, encantado con la experiencia de poner a Loreto Benito en el sillón de mando de la empresa farmacéutica. En su opinión, como en la de Garaña y Navarrete, los brillantes estudiantes deben tener paciencia para desarrollarse profesionalmente, han de pensar en una carrera internacional, la única que puede existir hoy si quieren tener éxito en un mercado global, además de contar con habilidades sociales, pues una de las atribuciones fundamentales de los consejeros delegados de las empresas es gestionar y motivar equipos, liderarlos. Algo que, uno tras otro, asombra a los universitarios, que esperan estructuras empresariales tan jerárquicas como antiguas.

José Francisco Ramón sabía que la innovación era un elemento fundamental en una empresa como Microsoft. Pero se quedó bastante sorprendido cuando le explicaron que no solo estaban trabajando en el próximo sistema operativo Windows, sino también con el que vendría después. Algo similar a lo que le ocurrió a Loreto Benito, cuando le explicaron que la industria farmacéutica investiga a menudo enfermedades de las que deberían ocuparse las instituciones públicas para lograr curar a los afectados, y pudo comprobarlo. O a Javier Cuéllar en el momento en que el presidente de Sony le detalló con precisión cómo la empresa ha conseguido superar la crisis.

Directivos reales y directivos por un día han sintonizado. Y así lo ponen de manifiesto. Además, unos y otros quieren seguir compartiendo experiencias. Los líderes empresariales de verdad están convencidos de que los que vienen lo hacen pisando fuerte y tienen deseos de conocer esa trayectoria de futuro que eligen y que, si sus previsiones se cumplen, les llevará directamente al éxito en la gestión empresarial.