La prescripción de los delitos de Fabra se resolverá antes de ocho meses
El caso Fabra estará a punto de cumplir sus ocho años de instrucción cuando el Tribunal Supremo decida si finalmente cuatro de los cinco delitos que se le imputan al presidente de la Diputación y del PP de Castellón, Carlos Fabra, han prescrito o no. Fabra está acusado, además, de la comisión de un presunto delito de tráfico de influencias, otro de cohecho y un fraude fiscal que fue denunciado por la Agencia Tributaria por el ejercicio fiscal de 1999.
La Audiencia de Castellón ha admitido la posibilidad de que su decisión de declarar prescritos los delitos fiscales detectados por los peritos entre 2000 y 2004 sea recurrida, por lo que la fiscalía y la acusación popular trasladarán sus argumentos al Tribunal Supremo en un plazo de 15 días. A partir de entonces, los tiempos que baraja el alto tribunal sitúan entre seis y ocho meses el tiempo para dirimir el tema, que podía prolongarse hasta un año.
Cinco magistrados de los 15 que componen la sala segunda, la de lo penal, serán los encargados de ver los recursos de estas acusaciones.
La sección segunda de la Audiencia Provincial de Castellón decidió hace poco más de un mes declarar prescritos cuatro de los cinco delitos fiscales de los que estaba acusado Carlos Fabra. Los magistrados entendieron que aunque hubo una investigación abierta a lo largo de cinco años, durante los que los peritos estuvieron cotejando las cuentas y el patrimonio de Carlos Fabra y su familia, esta actuación no se puede considerar como el acto jurídico necesario para paralizar los plazos de prescripción de dichos delitos.
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