Citroën planea un ERE en 2011 por la caída de las ventas
Ya no pasará a la historia por haber sido la única fábrica de automóviles de España que en esta crisis no ha necesitado hacer un Expediente de Regulación de Empleo (ERE).
Los trabajadores de Citroën conocieron ayer que la multinacional gala va a mandar a casa a parte de la plantilla el año próximo año. Más allá de especulaciones no se ha definido a cuántos empleados afectará ni durante cuánto tiempo. "Este año vamos a producir unos 400.000 vehículos. Las estimaciones para 2011 rondan los 374.000", argumenta la fábrica. Y el mayor tijeretazo va a recaer en una de sus dos líneas de montaje, la responsable de los monovolúmenes.
Son los operarios de esta parte de la cadena los más perjudicados, ya que su "bolsa de horas", un mecanismo de flexibilidad para amortiguar las variaciones en los pedidos, está completamente agotada. Echando cuentas, podrían ser más de 2.000 los afectados.
El anuncio de Citroën cogió a los sindicatos por sorpresa. No porque no esperaran un descenso en la producción, sino porque la actitud de la dirección, al avanzar que habrá un ERE, abandona la costumbre del grupo automovilístico de agotar todas las alternativas antes de tomar medidas traumáticas. "No se puede demonizar el ERE", les transmitió el director de Recursos Humanos durante la reunión. "Será una medida transitoria mientras no se produzcan los nuevos lanzamientos", añadió.
Ahora toca negociar la suspensión temporal de los contratos, un proceso que podría alargarse hasta después de Navidad. Algunas fuentes sindicales calculaban ayer que el ERE podría tener una vigencia de un mes, dependiendo de si paralelamente se mantiene la cadencia de producción actual, de 45 coches a la hora en turnos de 16 horas diarias (720 unidades). Si se relaja este ritmo serán necesarios menos días de parada. Las estimaciones más pesimistas creen que afectará a 3.500 contratos.
"Hemos estado dos años demostrando que podíamos evitar un ERE y hoy no se habló de buscar más soluciones", insistió desde UGT Rubén Pérez. La previsión de montaje de monovolúmenes es de 131.000 para 2011, es decir, el 35% del total para el año próximo. Pérez le recordó a la dirección que no pierda de vista "todos los esfuerzos que ha hecho la plantilla", para asumir una caída de producción de 150.000 coches en los últimos años.
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