Barberá se endeuda aún más para salvar las inversiones de 2011

Valencia tirará de deuda para salvar las inversiones del año próximo. De los 49 millones de euros para nuevos proyectos previstos en 2011 por el Gobierno local que preside Rita Barberá, 35 se conseguirán por la vía del crédito. Aun así, el capítulo seis cae un 21%, con una rebaja de 13 millones respecto al año en curso. Valencia espera de la Generalitat 163 millones de euros con cargo al Plan Confianza, un programa con niveles muy bajos de ejecución.

El Consistorio asumirá el próximo viernes un préstamo in extremis y así eludir la limitación para endeudarse que impone el Gobierno en la ley de Presupuestos del Estado del próximo año. Estos 35 millones computarán con cargo a 2010 pero se quedarán de remanente para 2011. Según el proyecto de ley, los Ayuntamientos españoles con una deuda superior al 75% de su presupuesto no podrán pedir ni un céntimo de euro a las entidades financieras. Es el caso de Valencia, que con un endeudamiento de casi el 110% acabará el año con una deuda de 886 millones de euros.

La capital tendrá un presupuesto de 693,7 millones, con una caída del 9,8%

Pese a todo, según explicaron primero Barberá y luego el concejal de delegado de Hacienda, Silvestre Senent, y hasta el interventor, la Corporación acabará el año con un índice del 107,4%, inferior al actual, gracias a que la deuda que se toma de referencia es la de 2009, no la de este curso.

"Si el año pasado fue el presupuesto del zarpazo, este año será el de la cabriola", dijo Barberá. Las cuentas municipales de 2011 ascenderán a 693,7 millones de euros, con un descenso del 9,8% -75,5 millones de euros menos que este año-. El consolidado, al que se añaden los presupuestos de las empresas y entes municipales, asciende a 788 millones de euros, con una caída del 10% respecto a 2010.

El Gobierno local sacará adelante el año próximo proyectos como el retén policial en el centro histórico, la ampliación del Parque de la Rambleta, el Pont de Fusta, la mejora de los accesos a la depuradora de Pinedo, la reforma del Casinet o la rehabilitación de Sant Vicent de la Roqueta. Uno de los proyectos estrella es la creación de un centro de formación juvenil en la nave rehabilitada de Juan Verdeguer. El Gobierno local mantendrá el gasto en políticas sociales pese a los recortes, prometió la alcaldesa, quien subrayó que no subirá por cuarto año consecutivo los impuestos.

Uno de los ahorros más importantes se producirá en el capítulo de personal, gracias a la amortización de 17 empleos y al recorte del 5% del sueldo de los funcionarios que, según Barberá, acabará amortizando deuda municipal.

Antes de presentar los datos, la regidora cargó contra el Gobierno español, por impedirle endeudarse más en 2011. También se quejó de que el Ejecutivo "presupueste tan mal" y entregue anticipos del fondo local que luego ha de devolver y negó que Valencia sea la segunda ciudad española más endeudada. Y como no hay mejor defensa que un buen ataque, la regidora acusó al Ayuntamiento de Barcelona de centrifugar deuda hacia empresas municipales.

La portavoz socialista, Carmen Alborch, lamentó ayer que Barberá desperdicie otra ocasión para sanear las cuentas y paliar los efectos de la crisis.