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ELECCIONES CATALANAS | Faltan 13 días

Duran advierte de que la mayoría de los nacidos son hijos de inmigrantes

El líder de Unió insta a los catalanes a procrear para que Cataluña "no caduque"

Àngels Piñol

La baja natalidad de Cataluña ha sido una obsesión de Convergència i Unió (CiU) desde hace una década y ayer recuperó ese lugar común. La federación nacionalista organiza en cada campaña un acto de apoyo a la familia -"ya es un clásico", bromeó Artur Mas- y esta no ha sido una excepción. En un mitin en el pabellón La Farga, en Banyoles, salpicado de juegos infantiles y con artesanos tocados con barretina, Josep Antoni Duran Lleida, secretario general de CiU, instó a los catalanes de origen a tener descendencia porque, dijo, ahora la mayoría de los bebés que nacen son hijos de inmigrantes.

"Bienvenidas sean esas criaturas, pero obviamente debemos ser conscientes de que tenemos un problema: en Roses, Palafrugell, Salt o Lloret más del 50% de los niños que han nacido en los últimos tiempos son de madre extranjera", proclamó Duran Lleida, partidario de fomentar la natalidad para garantizar que Cataluña no tenga "fecha de caducidad". "Así como vamos ahora no vamos bien", advirtió ante una pequeña tribuna llena de niños.

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La idea no es nueva, pero sale en todas las campañas. Jordi Pujol ya defendió esa estrategia en 2000, y en la campaña de 2003 el mismo dúo Duran-Mas prometió en una rueda de prensa "triplicar" las ayudas a la natalidad para que Cataluña no se "desnaturalizara" y el país se convirtiera en un lugar "decadente y condenado a la extinción". En total, 300 millones de euros. CiU repitió la misma historia en 2006 y los partidos de izquierda tacharon la propuesta de "etnicista" y "excluyente".

Ahora, en 2010, los biorritmos están más bajos. Duran dijo que al tripartito le entra "urticaria" cuando se le menta la familia, pero Mas fue moderado. Está realizando una campaña en positivo para no molestar a nadie, entre otras cosas para captar votos de todos sus rivales. Sabe que si no comete fallos garrafales será presidente. Por eso, no cayó en la zanja de la inmigración que abrió Duran en un perfecto reparto de papeles entre el bueno y el malo.

Santi Vila, alcalde de Figueres y candidato por Girona, abrió la fiesta defendiendo la familia desde la "pluralidad y la diversidad", e ilustró la "rabiosa" actualidad de la misma y de la tradición con un par de curiosos ejemplos. "Hace unos días organizamos un encuentro de hereus y pubilles, y luego hicieron una fiesta y te dabas cuenta de que escuchaban Estopa, Facto de la Fe o Mecano", dijo. Y después citó el hallazgo de un cráneo de 1,8 millones de años que, según los arqueólogos, perteneció a alguien que sobrevivió porque recibó ayuda. "La familia ya existía", dijo Vila.

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Mas no promete porque teme que en las arcas solo haya deudas, pero recalcó que su voluntad será apoyar económicamente a quienes deseen tener hijos. "En la familia se ha cobijado mucha gente en el paro", señaló Mas, que dijo que la natalidad es básica para sustentar el Estado de bienestar y las pensiones sin hacer distingos entre quien tiene hijos y quien no.

Josep Antoni Duran i Lleida y Artur Mas, ayer, en Banyoles
Josep Antoni Duran i Lleida y Artur Mas, ayer, en BanyolesEFE

"PSOE y PP, del brazo"

Tras la volcánica campaña de 2006, CiU ha apostado por una de baja intensidad y tono monocorde. Mas sabe que quizá pueda aburrir, pero no quiere salir de esos márgenes. "Nuestro lema es

Una Cataluña mejor

y nuestro símbolo una sonrisa", recordó, permitiéndose la

licencia

de criticar el desembarco de Mariano Rajoy y José Luis Rodríguez Zapatero en el primer fin de semana de campaña.

"Espero que Cataluña sea la primera en romper los colores rojo y azul del PSOE y el PP. Por nosotros no se pelean. Ya les va bien una Cataluña triste y gris. Eso sí: bien ordeñada y periférica. En eso van del brazo", avisó. El CIS pronostica para CiU una mayoría de 59 escaños que esta ve justa. Duran reiteró que el presidente Montilla, si puede, reeditará el tripartito. "Si puede, antes de que el gallo cante tres veces, lo hará. Como decía el

marxista

, Groucho Marx", ironizó, "los principios, si no le sirven, los cambiará".

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