Feijóo: "Buscamos en Bruselas el apoyo que nos niega Madrid"

Cada rueda de prensa, un nuevo palo, o varios, al Gobierno central. Ya sea por los anticipos a cuenta que el Ejecutivo de Zapatero adelantó a las autonomías estos últimos años y que todas tendrán que devolver, por el decreto de carbón que perjudica a las térmicas gallegas o por los bajos precios de la leche. O, últimamente el aval que le faltaba al astillero Vulcano -fue aprobado ayer- para hacer frente al pedido de un buque sísmico cuya construcción peligraba por los problemas económicos de la empresa.

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, siempre tiene un ministro a mano al que culpar. Desde hace semanas, tras reuniones de Gobierno en la que apenas se aprueban proyectos de calado, Feijoo va deslizando la idea de que Zapatero y su Gobierno atacan a Galicia. Ayer, después de que la Comisión Europea rechazase la idea de Portugal de desviar las ayudas finalistas que concede Europa del tramo del AVE Vigo-Oporto a la conexión Lisboa-Madrid, Feijóo concluyó que la Unión Europea se preocupa mucho más por Galicia que el Gobierno socialista. Lo hizo después de que hace unas semanas él mismo enviase una carta al presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durão Barroso, para que desautorizase el desvío de esos fondos comunitarios al otro trayecto de la alta velocidad ferroviaria. Ese gesto fue considerado como una injerencia en la política internacional que compete al Gobierno de España por el ministro de Fomento, José Blanco, quien amonestó también por carta a la Xunta y a su presidente.

En Consellos sin proyectos de calado se repiten los ataques al Gobierno

Ayer, después de que la Comisión Europea rechazase un uso distinto por parte del Gobierno luso de esos fondos comunitarios, Feijóo sacó pecho. "Lamento que la Xunta tenga que buscar en Bruselas el apoyo que se nos niega en Madrid. La Xunta defiende los intereses generales que no interesan al Gobierno de España", concluyó. A renglón seguido invitó al Ministerio de Fomento a iniciar la conexión con Tui para que Portugal haga lo propio desde la frontera hasta Oporto.

Para refrendar su tesis de que los gallegos han de estar más agradecidos a Europa que al Gobierno español, recuperó la decisión del Tribunal de Estrasburgo de paralizar el decreto del carbón. "Bruselas mira más por Galicia que el Gobierno de España", dijo en este caso.

Tras el Consello de la Xunta, horas antes de que se conociese la decisión del Ministerio de Industria de avalar a Vulcano, aún halló Feijóo una nueva afrenta. Pidió al departamento de Miguel Sebastián "que deje de marear y jugar con el futuro de mil familias", las que dependen directamente del astillero.

En su enésimo ataque al Gobierno central, Feijóo sumó todavía un asunto más. Respondió, a preguntas de los periodistas, que el conflicto del Sáhara y la agresión a los derechos humanos no se soluciona a través de "circunloquios y frases hechas". Ya por la tarde se supo de la tramitación del aval a Vulcano.

Las declaraciones del presidente se produjeron tras la reunión semanal del Gobierno en la que se dio luz verde a la expropiación de terrenos en un tramo de siete kilómetros de la Vía de Alta Capacidad da Costa Norte por 8,1 millones de euros. El Consello de la Xunta también autorizó otro gasto de 5,4 millones de euros para la primera fase de los accesos al futuro hospital de Pontevedra, cuyo proyecto constructivo estará listo antes de final de año.