Un resultado engañoso

En cinco días, el índice selectivo español, el Ibex 35, apenas ha avanzado un 0,57%. Podría deducirse de este resultado que la última semana completa de agosto ha sido tranquila. Con calma chicha. Pero cuando se ve la evolución día a día, la conclusión es la contraria. Todas las jornadas el índice que agrupa a las mayores empresas cotizadas españolas ha acabado con movimientos superiores al 1%. Incluso el miércoles cerró por debajo de los 10.000 puntos. El jueves y el viernes se impusieron las compras y al final se recuperó esa cota.

Precisamente, los 10.000 puntos se consolidaron el viernes. El día en que las dudas sobre la recuperación económica estadounidense se solidificaron. Se supo que el PIB había crecido menos de lo anunciado en principio. De hecho, tuvo que salir el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, para asegurar que está dispuesto a salir al rescate si es necesario.

La semana le ha sentado especialmente bien a las constructoras. Los tres valores que más han avanzado en estos cinco días forman parte de este sector. Los encabeza la compañía de la familia Del Pino, que ha ganado un 8,36%. OHL y Acciona también han obtenido réditos, aunque no de la entidad de Ferrovial. La primera ha subido un 3,47%; la segunda, un 3,06%.

Junto a las constructoras, el mérito de que la semana se haya cerrado en positivo también hay que anotárselo a los dos grandes valores, sobre todo a Telefónica. La operadora ha subido un 1,4%. Banco Santander, por su parte, ha contribuido menos. Sus ganancias han sido un exiguo 0,25%. Pero, dado su gran peso en el resultado final del índice selectivo, su aportación siempre es decisiva.

También en el resto de Europa las grandes firmas de telecomunicaciones han hecho un buen papel esta semana. En el índice paneuropeo EuroStoxx 50 -que ha perdido un 0,52%- operadoras como Telecom Italia, Deutsche Telecom y France Telecom. El elenco lo completan firmas agroalimentarias y otras empresas de consumo. Los sectores donde desarrollan su actividad estas compañías -sectores en los que la demanda es más rígida que en otros, y por tanto están menos sujetas a los vaivenes de la coyuntura- demuestra que los inversores temen la vuelta de la recesión y apuestan por valores refugio.

Al igual que ha sucedido con el Ibex, en el mercado de las materias primas, el petróleo ha avanzado posiciones tras dos semanas retrocediendo. Todavía está lejos el crudo de los 85 dólares que llegaron a pagarse por un barril brent -referencia europea- a comienzos de mes. Pero esta semana se ha encarecido. El viernes llegó a pagarse a casi 77 dólares.

Más tranquilo ha estado el mercado de divisas. La batalla entre el euro y el dólar casi ha acabado en tablas. La divisa europea ha ganado un poco respecto al billete verde. El viernes un euro se cambiaba por 1,27 dólares. -