La magia del Corral del Carbón
Obras de Lorca, Cervantes y Muñoz Seca dan vida a un mítico lugar de Granada
Los amantes del teatro tienen una cita con Granada en las noches de verano. El Corral del Carbón, que es la única alhóndiga andalusí que se conserva íntegramente en España, recupera en agosto su antigua función, puesto que, a comienzos del siglo XVI, fue destinada a corral de comedias. E incluso se cree que allí representó obras el dramaturgo sevillano Lope de Rueda.
Cada verano, y van 11, la compañía Teatro para un Instante llena de vida este espacio histórico y traslada varios siglos atrás al público. En un patio de pequeñas dimensiones, que apasiona a los actores por la cercanía del espectador, la compañía que dirige Miguel Serrano ha iniciado el ciclo con una puesta en escena sorprendente de La Tragicomedia de don Cristóbal y la señá Rosita, de Federico García Lorca (días 23, 24 y 30).
Se cree que Lope de Rueda representó obras en esta alhóndiga andalusí
Hasta el 1 de septiembre permanece la oferta que se completa con los entremeses El viejo celoso y La cueva de Salamanca, de Miguel de Cervantes (hoy, 19, 25, 26 y 31), y La venganza de don Mendo, de Pedro Muñoz Seca (20, 21, 27, 28 y 1 de septiembre). Se trata de tres propuestas que pretenden invitar al público a que asista a la "confrontación" de tres autores y tres maneras de entender la comedia a través de los subgéneros del entremés, la tragicomedia y el astracán, según explica Serrano.
En pleno corazón de la ciudad, las noches del Corral son una oferta cultural a precio asequible (13 a 15 euros por entrada o un abono de 33 euros para las tres). Aunque el conjunto de la propuesta tiene una "razón propia" y un "interés como oferta global", según señala el actor y productor Pepe Cantero, también puede disfrutarse de cada espectáculo aislado, ya que vuelven "mejorados", dicen sus responsables, al Corral del Carbón.
El patio, que no llega a los 16 metros de ancho por 17 de largo, está circundado por tres órdenes de galerías que aprovecha la compañía para su puesta en escena en cada representación. "Bonita", "más bien peculiar", discrepaban la primera noche dos de los espectadores que asistieron a la farsa de Lorca. El montaje une el trabajo actoral con el de títeres para presentar la historia de amor truncado de doña Rosita, que ha sido entregada en matrimonio por su madre a un borracho don Cristóbal.
La iluminación, especialmente cuidada, y la agradable temperatura que a finales de agosto suele hacer de noche en Granada garantizan la "cálida acogida" en la que confían los responsables de la compañía. Dicen que "risas a toda costa" están garantizadas con el astracán creado por Muñoz Seca y "risas sin reticencia" provocan los entremeses de Cervantes que tratan sobre la infidelidad conyugal en tono de farsa intrascendente.
La Universidad de Granada se une al proyecto con una mesa redonda que cerrará el ciclo el 2 de septiembre y lleva por título Miradas sobre la comedia. El ciclo incluye un espectáculo de flamenco y poesía los días 22 y 29 titulado Velo y pluma.
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