Sanidade pide a los alcaldes apoyo para hacer ambulatorios con capital privado

Varios alcaldes gallegos que tienen pendiente la construcción de un centro de salud en su municipio recibieron a final de julio una carta del Servizo Galego de Saúde (Sergas). En ella se les solicitaba su "conformidad con el proyecto" del ambulatorio "mediante la contratación por pago aplazado".

El modelo, usado más frecuentemente en hospitales, consiste en que una empresa privada sufraga la infraestructura y asume servicios como seguridad, limpieza o mantenimiento. A cambio, la Administración paga un canon anual que, pasados los años de contrato, suman un montante muy superior al importe que invirtió la empresa.

Los detalles de cuántos años durará el canon y cuál será el sobrecoste final tienen que estar reflejados en los pliegos de licitación. Según afirma la Consellería de Sanidade en la carta remitida a los ayuntamientos, la preparación de estos documentos "está finalizando".

Una carta solicita la conformidad con el modelo de financiación

El Bloque preguntará en el Parlamento cuál será el sobrecoste

Además de eso, la única novedad que aporta la misiva es la de explicitar y solicitar la conformidad con el modelo de financiación público-privado, ya que, como recoge el propio texto dirigido a los alcaldes, los pasos administrativos previos a la construcción de los ambulatorios ya están dados: "Así tenemos previsto licitar la construcción de los centros de salud comprometidos en este ejercicio en los que se cumplieron todos los pasos legales y administrativos por parte del Ayuntamiento en la cesión de la parcela necesaria para su contratación. Entre ellos está el centro de salud de tu municipio".

La diputada del BNG Ana Luísa Bouza, que hizo ayer públicas estas cartas, sospecha que no buscan más que "un compromiso de los alcaldes con el modelo" que se les propone para garantizar a las empresas que podrán ser ellas las que se encarguen de las infraestructuras. "O eso o es que hay algún problema de plazos y quieren culpar a los ayuntamientos", afirmó. De lo contrario, no entiende para qué se manda una carta de estas características "en mitad del verano".

Según la nacionalista, la consellería comprometió un presupuesto de 47 millones de euros para la construcción de 21 centros de salud este mismo año. Bouza aseguró que todavía no se ha comenzado a gastar este dinero. "En la memoria no se especifica qué fórmula se empleará para la construcción con fondos privados ni el tipo de gestión posterior. Tampoco cómo va a afectar este nuevo sistema a la gestión de los centros de salud que ya están funcionando", añade la diputada.

Para aclarar todos estos términos, el BNG preguntará en la comisión parlamentaria de Sanidade si están definidas las localizaciones para los centros, qué condiciones y plazos tiene el Gobierno gallego definidos para los ambulatorios, qué servicios prevé que no se mantendrán bajo la gestión pública del Sergas, si afectará la licitación de las nuevas concesiones a servicios prestados en centros actualmente en funcionamiento, cuál es el coste de construcción de cada uno, de cuánto será el canon que pagará la Xunta y cuál será el coste total de los ambulatorios.

La parlamentaria expresó también su rechazo a este modelo de financiación, que a la larga "encarece entre tres y siete veces" una infraestructura. El Sergas, en su misiva a los alcaldes, ya se encarga de explicar las bondades que ve en el sistema: "Como bien conoces y teniendo en cuenta el contexto económico actual, la disminución de las transferencias del Estado a nuestra comunidad autónoma, así como la necesidad de hacer posibles las inversiones en Galicia para crear empleo y avanzar en la salida de la crisis, la Consellería de Sanidade está siguiendo las contrataciones de obras de infraestructuras con el modelo seguido por muchos servicios de salud de las distintas comunidades autónomas, e incluso el Gobierno central".

Aunque la consellería no explicó a este periódico la razón última de esta carta, distribuyó ayer una nota de prensa en la que abundaba en las razones que le llevan a elegir este modelo y en su compromiso con la atención primaria.

Los 21 centros de salud pendientes por licitar este año son los de A Capela, Malpica, As Nogais, Monterroso, Pereiro de Aguiar, Pontevedra, Ares, Arteixo, Culleredo, A Valenzá, O Couto y Vinteún (en Ourense), Ribadavia, Bouzas (en Vigo), Gondomar, Oia, Nigrán, O Grove, Tui, Santiago y Ames. La inversión está entre los 300.000 euros y los más de 3,7 que cuesta el de O Couto.