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Reportaje:

Lucha diaria para salvar la música

Dos sociedades musicales valencianas explican su fórmula de supervivencia

La antigüedad es un concepto que abarca experiencia y sabiduría. Frente a ello la juventud, que representa frescura, energía y superación. Ambos conceptos son clave para entender a dos de las 526 sociedades musicales de la Comunidad Valenciana que se han visto azotadas por los recortes presupuestarios de un 35%, que alcanzan el 55% en las escuelas de música, por parte del Consell, una institución que ha hecho caso omiso a la historia y a las perspectivas de futuro de todos aquellos que quieren unirse a la tradición musical de los pueblos.

La Sociedad Musical de Les Alqueries (La Plana Baixa) personifica la antigüedad y esos años de historia mientras que la Unión Musical de L'Eliana (El Camp de Túria) representa la juventud y las ganas de avanzar. Dos sociedades desconocidas, en mayor o menor medida, que tienen que hacer frente a uno de los peores periodos de su historia. Sus presidentes cuentan cómo saldrán adelante.

Los presidentes de las dos uniones musicales aseguran que harán ruido
"Valoran más los grandes eventos que la música valenciana"

La Unión Musical de L'Eliana es una de las más jóvenes de toda la Comunidad Valenciana. Nació en 1985 y se federó dos años después, como cuenta su presidente, Amadeo Marco. Este año "será difícil de olvidar", dice, "ya que los recortes se hacen justo en el 25º aniversario de nuestra sociedad musical", una celebración que ha disparado los gastos presupuestados. Por esto, la Unión Musical pidió al Ayuntamiento de L'Eliana una ayuda de 25.000 euros para sacar adelante los eventos y, aunque no consiguió la totalidad de la cifra, sí logró que se comprometiera en la medida de lo posible y añadiera su granito de arena a los 24.000 euros pactados en convenio. "Nosotros vamos facturando", comenta el presidente, "y el Ayuntamiento nos informará del momento en el que no pueda dar más".

Aún así, la situación es dura para la Unión Musical de este pequeño municipio, donde se podrían tomar medidas como el descenso de los sueldos, despidos o recortes de horas de trabajo. Además, en esta situación se podría ampliar, de dos a tres años los estudios de solfeo por falta de personal. Según Marco, es una de las soluciones presentadas para que todo siga igual, aunque "todavía no se ha concretado nada". La Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana (FSMCV) estima que el 70% de los 3.000 profesores de escuelas de música irá al paro y el 25% de los centros cerrará. Vender lotería y protagonizar fiestas para terceros forman parte del saco de las soluciones ya que ellos no pueden organizar conciertos y vender entradas porque son una asociación sin ánimo de lucro.

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En la Unión Musical de L'Eliana, se ha hablado de mecenazgo y de regresar a los principios para solucionar la situación y no depender de las administraciones, pero Marco piensa que volver a los orígenes "no es una buena idea" por el peligro que supone ponerse en manos privadas. "El servicio público se convierte en empresa y lo único que interesa es ganar dinero, algo que a nosotros no nos interesa", concluye.

Pese a todo, miran al futuro con cierto optimismo y esperan que el año próximo suba el presupuesto "al menos un 35%". Si eso no es así, el futuro se presenta "negro" y se "actuará en función de la realidad" y "en conjunto con la comisión comarcal".

Por su parte, la Unión Musical Alqueriense, en la comarca castellonense de La Plana, nació hace casi 100 años, en 1912, y lleva casi un siglo enseñando y creando un carácter cultural basado en la tradición musical. A ellos los recortes les han afectado gravemente y tendrán que tomar fuertes medidas para seguir adelante. Su presidente, José Antonio Torres, aúna esfuerzos para encontrar una financiación alternativa a la que les permite la Generalitat: patrocinadores privados, fundaciones, empresas locales y el Ayuntamiento son sus principales fuentes de supervivencia, aunque la subida de las cuotas entre un 30% y un 40% "es inevitable e irrevocable".

José Antonio Torres declara que las administraciones "deberían hacerse cargo del 100%" de las subvenciones "como ocurre en otras comunidades españolas" y asegura que la Generalitat "valora más los grandes eventos que la música valenciana".

La escuela de música de la localidad será la más afectada y, posiblemente, pierda alumnos y, por tanto, profesores. De momento la Junta Directiva no ha contemplado el despido, solo la reducción en un 15% del sueldo y el recorte de las horas.

Respecto a las bandas y los viajes de intercambio, dice Torres que se "autofinanciarán" mediante conciertos y actos ya que es uno de los vértices de motivación para alumnos y músicos, por lo que "no se deben eliminar".

El presidente de la Unión Musical Alqueriense declara, además, que a corto plazo se reducirán el número de escuelas y se cerrará una de las salidas laborales más cotizadas por los músicos. A largo plazo, en cambio, descenderá la calidad musical que tanto caracteriza a la Comunidad Valenciana en comparación con el resto de autonomías y, en consecuencia, la fama que se ha adquirido a lo largo de estos años sufrirá "un bajón considerable".

Ambas sociedades, la joven y la vieja, acudirán el día 17 de octubre a la manifestación convocada por la FSMCV para mostrar su rechazo contra de los recortes del Consell. Tanto el presidente de la Unión Musical de L'Eliana como el de la Unión Musical Alqueriense coinciden en una frase: "Vamos a hacer ruido".

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