El PNV acepta reunirse con Batasuna tras rechazar la presencia de Eusko Alkartasuna

El PNV descartó ayer secundar los contactos que con el polo soberanista conformado por EA y la izquierda abertzale han mantenido en las últimas semanas otros partidos como Aralar y Alternatiba. La formación jeltzale aceptó la oferta de una reunión formal con la antigua Batasuna para analizar la situación política, pero a título individual y tras descartar la presencia en el encuentro de EA. Desde Sabin Etxea argumentaron que "no tiene sentido una cita conjunta, cuando a día de hoy son dos partidos distintos, con sensibilidades diferentes".

El PNV se llegó a plantear una reunión a tres bandas durante buena parte de la jornada, pero finalmente redujo su compromiso a la izquierda abertzale, ya que fue ésta la que en nombre del polo soberanista presentó de manera oficial su oferta el pasado lunes. La formación que lidera Iñigo Urkullu, sin embargo, emplazó a EA a solicitar otro encuentro si lo estima oportuno, aunque aclaró que "en cualquier caso se realizaría por separado".

Los 'jeltzales' se remiten a citas por separado aunque barajaron una a tres bandas

Confirmada la cita, el PNV y la antigua Batasuna buscan ya hueco en sus respectivas agendas. Aún no se ha determinado el lugar ni la fecha de la reunión, aunque todo apunta a que se celebrará entre las dos próximas semanas. Tampoco se ha concretado qué lideres asistirán. Ambas partes tratarán de conformar una representación equilibrada.

El encuentro conllevará un salto de responsabilidad respecto a las discretas reuniones que ambas partes han mantenido desde 2009. La última se celebró el pasado 18 de marzo y no favoreció acuerdos concretos, sino un intercambio de posturas ante la apuesta por la "superación del conflicto político" que la izquierda abertzale se disponía a impulsar junto a EA y que el pasado 20 de junio tomó cuerpo en Bilbao. Desde el PNV consideran que el escenario no ha variado desde entonces, "al menos en lo que a la condena de la violencia respecta".

El propio Urkullu dejó claro el pasado domingo su escepticismo al asegurar que "en absoluto" habrá estrategias conjuntas del PNV con el polo soberanista. "Ni quieren que entremos en ese acuerdo ni nosotros queremos entrar, ya que tenemos nuestro propio proyecto y somos conscientes de que su objetivo es suplantarnos", afirmó.

La portavoz del Gobierno, Idoia Mendia, no fue menos contundente ayer al enmarcar el encuentro en "los prolegómenos" de las elecciones municipales y forales del año que viene. En este sentido, insistió en la advertencia a la antigua Batasuna de que su única opción de tomar parte en la política pasa por "separarse de ETA" y "no engañar una vez más a los ciudadanos".

Aralar puso la puntilla. El vicecoordinador de la formación, Jon Abril, aclaró respecto a su posible integración en el polo soberanista que "a día de hoy no se dan las condiciones para una confluencia", aunque no descartó la "colaboración". Según argumentó durante una entrevista en Radio Euskadi, "aún faltan pasos por dar" respecto a un desmarque definitivo del terrorismo por parte de la izquierda abertzale y "hasta entonces, será difícil llegar a acuerdos".

"El nuevo ciclo tiene que darse en ausencia de violencia. O ETA da los pasos o los tendrá que dar Batasuna. Y cuanto antes lo haga, mejor para todos", sentenció Abril, en lo que supone el primer desmarque contundente entre los protagonistas de la pretendida acumulación de fuerzas soberanistas.