Los menores podrán cumplir penas de tráfico en la escuela

Los menores condenados por delitos de tráfico y comportamientos incívicos podrán cumplir sus penas a través de programas educativos. Es una de las hipótesis de trabajo apuntadas ayer por la Fiscalía Superior junto a la Consejería de Educación, cuyos responsables se reunieron para intentar dar un vuelco a la problemática generada por los niños conflictivos que cometen delitos. El objetivo del fiscal superior, Jesús García Calderón, y el consejero, Francisco Álvarez de la Chica, es agilizar las respuestas para un grave problema que a menudo afecta a los profesores. Ayer se crearon cuatro grupos de trabajo pendientes de la firma de un protocolo.

- Delitos de tráfico. Las infracciones de la seguridad vial cometidas por menores representan el 10% del total. Ante esta desorbitada cifra que genera una "constante preocupación", según García Calderón, la solución pasa por el cumplimiento de las condenas a través de la escuela para obtener mejores resultados en el comportamiento de estos niños díscolos. Además, se baraja incluir la seguridad vial en la enseñanza posiblemente a través de la asignatura Educación para la Ciudadanía o mediante medidas para incentivar al profesorado. Las infracciones de tráfico representan el 40% de la delincuencia juvenil.

Los menores cometen el 10% de los delitos contra la seguridad vial

- Maltrato al profesorado. Tanto la Fiscalía Superior como la Consejería trabajarán para lograr una "unidad de criterio" en las agresiones a los profesores. El objetivo es que los docentes de la escuela pública y los de la escuela concertada tengan la misma consideración ante las agresiones. El problema es que los profesores de la escuela concertada no cuentan con la condición de autoridad pública, pero la fiscalía espera contar a partir de ahora con datos más exactos de los menores infractores "para analizar sus perfiles", según destacó Álvarez de la Chica.

- Absentismo escolar. La colaboración de ambas instituciones no busca judicializar los cientos de casos irregulares detectados. Cada año se producen denuncias de padres que conocen casos de familias que falsean su domicilio y otros datos para lograr que sus hijos accedan al colegio que desean. "Lo importante es contar con las apreciaciones de la fiscalía de cara a futuras normas", aclaró ayer el consejero Álvarez de la Chica. Educación quiere fijar una normativa que reduzca los problemas a los que verano tras verano se enfrenta tras las denuncias de unos padres contra otros.

- Absentismo escolar. La ausencia de la escuela es uno de los graves problemas que afronta la consejería y que con el tiempo fomenta la delincuencia juvenil y los comportamientos incívicos en los adolescentes. A esta mesa de trabajo se ha incorporado el Defensor del Pueblo, José Chamizo, para aportar luz en un problema tan espinoso. Se persigue analizar los antecedentes y las secuelas que conducen al fracaso escolar desde la perspectiva de los profesores, pero también desde la visión de los fiscales. Éstos intensificarán su colaboración con las comisiones locales contra el absentismo.