El PSOE cree que la decisión de la entidad no es irreversible
La decisión que adoptó ayer el Consejo de Administración de CajaGranada no era la preferida por los socialistas andaluces que hasta el último momento intentaron cambiar la opinión de sus consejeros de optar por una fusión fría en la que figura en tercer lugar en el banco que dirigirá el Sistema Institucional de Protección (SIP). La secretaria de Organización del PSOE, Susana Díaz, aseguró a mediodía de ayer que aún quedaban "horas" hasta la celebración del consejo de administración, convocado cuatro horas y media más tarde. Insistió en que hasta entonces se iban a mantener "conversaciones" por las "dudas" que la operación generaba en el PSOE. Díaz y el vicesecretario general socialista, Rafael Velasco, han sido los que de manera clara han mostrado sus discrepancias con la decisión. Velasco aseguró el lunes que el SIP aprobado "no fortalece" al sistema financiero andaluz. La posición de ambos ha contrastado con la tibieza del Gobierno andaluz.
Desde el PSOE se insistió ayer en que esta operación aún no es firme y por lo tanto consideran que no es irreversible. Se recuerda que deben aprobarlas las asambleas y también, las marchas adelante y atrás que las cajas españolas están dando en estos momentos. En este caso, la urgencia por el SIP viene dada por los plazos del Banco de España para que antes de mediados de mes las entidades pidan ayudas públicas del FROB.
Desde la óptica granadina la visión no es la misma. Desde hace mucho tiempo, la antigua General de Granada prefería buscar socios fuera y de un tamaño similar que mirar hacia Málaga o Sevilla.
"Respetamos la decisión y esperamos que sea bueno para el sistema financiero andaluz", dijo anoche sin mucho apasionamiento Rafael Velasco.
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